Diferentes sectores productivos de la ciudad y de la provincia se concentraron a primera hora de la mañana en la explanada de Expourense para emprender una ruta por las diferentes calles de la ciudad con el fin de reivindicar soluciones para el sector de la hostelería que engloba a muchos más individuos que no solamente a los propietarios. Así pues comerciales, distribuidores y colectivos del ocio formaron una caravana de más de 200 coches, furgonetas y camiones con los que congestionaron el tráfico para así llamar la atención de la sociedad ourensana y también de los poderes públicos con el fin de reclamar y reivindicar ayudas para un sector que permanece cerrado por decreto de la Xunta.
Desde Expourense hasta A Ponte, pasando por las principales calles de la ciudad y portando carteles y haciendo sonar los claxon de los vehículos para pedir contraprestaciones a la inactividad de un sector que hoy se reúne con los partidos políticos del Concello con el fin de evaluar medidas que adelgacen la crisis económica que está viviendo el sector. En Oímbra los propietarios de bares no pagarán autónomos será el concello y en Vigo tampoco pagarán agua, por ejemplo, entre otras medidas.
Las asociaciones y grupos de propietarios de hostelería ourensano buscan un apoyo en la Administración para que no suponga una pérdida total de la actividad que en muchos casos está en juego. Son críticos con el gobierno gallego por unas ayudas que no son directas y en las que las bases “no se adecuan con lo que estamos viviendo”. Tras el anuncio del presidente Núñez Feijóo de una línea de créditos directa, dicen que “hay que leer la letra pequeña y después a ver”.
Mientras recorrían las calles de la ciudad se conocían los nuevos datos de la jornada del coronavirus que rebaja por décimo día consecutivo los casos activos hasta los 880, 49 menos que ayer producidos por el número de altas por curación que doblan a los nuevos casos detectados, 41 nuevos positivos por las 88 personas que superaron la enfermedad.
La descongestión de la hospitalización es paulatina en los hospitales, mientras que se mantienen 15 personas en estado de gravedad en la unidad de críticos del CHUO.
Así pues en el hospital ourensano hay 62 personas en planta, en el comarcal de O Barco 10 y en el verinense tan solo 5.
La curva epidemiológica se suaviza más en la provincia y también en la ciudad a pesar del pequeño repunte ayer que deja los casos activos en 292. Hoy se reúne el comité de expertos para evaluar las medidas impuestas y otras a imponer en diversos concellos de Galicia y todo hace indicar que las medidas seguirán. La curva se aplana y tiende a una tendencia estable de reducción de casos de forma significativa, pero no es suficiente. La incidencia del virus se rebaja en un 50% en un mes en la ciudad y la provincia luce un color verde en la mayoría de concellos, significado que ninguna está en alerta. Solamente nueve concellos permanecen con una incidencia preocupante como son Ribadavia y Xinzo que están en color rojo, seguidos de Ourense, Barbadás, Verín y A Rúa en naranja (nivel 2) y O Barco, Monterrei y O Carballiño en nivel 1 en los últimos siete días. Ayer no se produjo ninguna muerte por coronavirus en la provincia de Ourense. Un hecho que no se producía desde 24 de octubre.
Emilio González agradece el compromiso de la ciudadanía
El subdelegado del Gobierno en Ourense, Emilio González, agradeció “el esfuerzo, la comprensión y la responsabilidad”. En este punto, insistió en “no relajar las normas establecidas para contener el virus y contribuir, más todavía, al descenso”. El subdelegado del Gobierno también agradeció a las fuerzas y cuerpos de seguridad “el enorme trabajo y esfuerzo que están realizando desde el pasado mes de marzo para proteger la salud de la ciudadanía y velar por el correcto cumplimiento de las diferentes medidas puestas en marcha para frenar los contagios de coronavirus”. En la reunión llevada a cabo se puso de manifiesto la efectividad de los dispositivos de control en la colaboración con el descenso del índice de contagios detectados en la provincia.
Prosagap pide el cese de la gerencia del área sanitaria
El sindicato Prosagap de Ourense, Verín y O Barco solicita “el cese de la gerencia del área sanitaria por su continúa improvisación en la gestión en la segunda ola de la pandemia”. Explica que “no se adecuaron los espacios suficientes para la atención de los pacientes críticos”, lo que obligó a derivar a pacientes a otras áreas sanitarias. Tampoco se formaron profesionales de unidades de críticos “cuando las condiciones lo permitían y ahora dicen que no pueden garantizar las vacaciones ni los descansos de los profesionales”. Además, la contratación del personal continúa siendo precaria, con renovaciones mensuales, en el mejor de los casos y sin garantizar los permisos sin sueldos por conciliación familiar. “Y tampoco estipulan el tiempo máximo de uso continuado de los EPIs que sea seguro para la salud de los profesionales”, apunta Prosagap.
