Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Festival de Cine de Ourense, 25 años

Desde el pasado 24 de septiembre hasta el 2 de octubre se celebró en nuestra ciudad la vigésimo quinta edición del Festival de Cine de Ourense (conocido con las siglas OUFF), que con diversos apoyos lo viene organizando en los últimos tiempos la Diputación Provincial, dado que para el ayuntamiento su realización era una carga económica bastante elevada. Consideramos que, al cumplirse sus veinticinco años de vida, es importante hacer un balance del mismo y una pequeña historia y semblanza de las actividades desarrolladas en su programación a lo largo de los tiempos, desde su creación en el año 1996 hasta la actualidad. Comentando sus aspectos positivos y también, como es lógico, aquellos menos positivos y algunos pequeños avatares surgidos en su devenir histórico.

Por formar parte como vocal el autor del presente artículo, en el momento de la gestación y nacimiento del festival, en la primavera de 1996, del “Consello Municipal de Cultura”, y también por nuestra amistad con Eloy Lozano Coello, su diseñador y creador, conocemos de forma viva, real y directa la forma de como nació, las dificultades que hubo para ponerlo a andar, y como al final, casi de milagro, acabó siendo realidad y se pudo organizar la primera edición, entre el 4 y el 10 de noviembre de 1996. Lozano ayudó de forma asidua desde principios de los setenta a los directivos del Cine Club “Padre Feijóo”, y más tarde incluso formó parte de su directiva, siendo muy importante su apoyo en la organización de las Xornadas do Cine y las Mostras Cinematográficas de Arte y Ensayo de las fiestas mayores de la ciudad, y en la programación habitual, y desde este cine club, que ayudó a recuperarlo en la crisis que tuvo en 1978, orientando sobre la colocación de unos proyectores de cine en 35 mm. en la cabina de la Casa de la Cultura, que fueron la salvación de la entidad. A principios de la década de los setenta había terminado sus estudios de imagen en la Complutense de Madrid y regresó a su ciudad con el flamante título de realizador cinematográfico, haciendo de él un cineasta de especial sensibilidad fílmica, por la imagen y por la cultura cinematográfica, por lo que no debe extrañar que se implicase en el funcionamiento del cine club y poco más tarde, además de recuperar la hermosa película O carro e o home de Antonio Román, cuya copia estaba abandonada en el Museo Arqueológico, realizó interesantes cortometrajes y un largometraje, algunos de los cuales se proyectaron por primera vez en el “Padre Feijóo”.

Por esto no debe extrañar, dada su gran afición por el cine y su profesionalidad en el tema, que en 1995 tomase la decisión de diseñar el proyecto de un Festival de Cine para nuestra ciudad, que bautizó con las siglas “OUFF”, siendo él el auténtico creador del mismo. Y que tuvo la suerte de contar con el apoyo inicial (algo así como un “capricho personal”) de la esposa del alcalde de la ciudad en aquella altura, que era Manuel Cabezas, el que vio bien que el ayuntamiento asumiera como propia en el área de cultura la organización del festival. El tema se llevó a la orden del día del “Consello Municipal de Cultura”, integrado por representantes de las entidades culturales, recreativas, educativas y vecinales de la ciudad, y algunos miembros propuestos por la corporación entre las personas de la ciudad que destacaban en el campo cultural, en la primavera de 1996, para ser aprobado. Sobre el tema tuvo lugar en el “consello” un largo debate, en el que se comprobó que gran parte de sus miembros no simpatizaban con la idea, considerando que no era una actividad importante para la ciudad y, especialmente, que su coste y presupuesto eran demasiado elevados, y que el dinero público debería ser para actividades más prioritarias. Durante casi una hora, el presidente y secretario del Cine Club “Padre Feijóo” , respectivamente, Segismundo Bobillo y José Paz, intervenieron para defender el proyecto de Lozano, considerándolo muy interesante para la cultura de la ciudad y su proyección exterior, y además porque Ourense había sido el lugar histórico donde, con las “Xornadas do Cine”, había surgido la importante idea de la necesidad de que existiese un cine gallego en nuestro idioma y sobre temas de nuestra tierra. Y que no deberíamos tirar por tierra esta tradición. Finalmente, la intervención de estos cine-clubistas logró vencer la resistencia de la mayoría de los miembros del “consello”, y la realización del festival fue aprobada, aunque no por unanimidad. La primera edición tuvo lugar en noviembre de 1996, y esto que venimos de comentar tenían que conocerlo los ourensanos, y muchos de los responsables posteriores de su organización hasta la 25ª edición última.

Eloy Lozano, el creador del festival, desde un principio consideraba que debería ser fundamentalmente una actividad para promover el cine de autor y su entorno social, además de ser un encuentro anual para profesionales cinematográficos gallegos, y, a poder ser, un importante retorno económico para Ourense, que durante décadas tuvo un especial vínculo con el cine y, en especial, con la necesidad vital de que surgiese y se desarrollase un cine gallego con proyección europea internacional. También que este festival fuese una muestra de las producciones más destacadas del cine independiente de todo el mundo y un lugar de encuentro para los profesionales, como una plataforma promotora del audiovisual de todo el planeta. De forma sintética, los tres objetivos esenciales del festival, los establecía su creador de la siguiente forma: a.-Promover, sirviendo de plataforma delante del público y los profesionales de la imagen, las obras cinematográficas y audiovisuales más innovadoras y controvertidas producidas en Galicia y otros países de la Tierra, y de cine independiente, que puedan contribuir al entendimiento mutuo entre las diferentes culturas que existen; b.-Servir de encuentro e intercambio entre Galicia, Europa, Latinoamérica y los otros continentes, para la formación, desarrollo, coproducción, difusión y distribución del audiovisual gallego e internacional y c.-Favorecer un lugar de trabajo para difundir y desarrollar el audiovisual y la cinematografía, especialmente del ámbito lusófono y gallego, proyectándolo en el espacio europeo e internacional.

Además de todo lo señalado, el festival tenía que tener un importante impacto en los medios de comunicación, y no solo por presentarse en el mismo películas a competición, para ser premiadas en su caso, presentadas por sus creadores, realizadores, directores, productores y hasta actores y actrices, sino también por la participación de destacados expertos en charlas y mesas de debate, dedicadas a la formación, coproducción, mercado y distribución de las distintas creaciones fílmicas, como es el caso de las denominadas “Conversas OU”, que sirven para reflexionar y dar impulso a la actividad cultural e industrial del elemento audiovisual y cinematográfico. Muchas de las películas nacionales e internacionales premiadas en el festival tuvieron posteriormente una buena distribución comercial, y no solo sirvieron para dar visibilidad a proyectos fílmicos alternativos en los circuitos habituales y descubrir nuevos creadores y realizadores del séptimo arte. En el OUFF tiene cabida el cine de todas las nacionalidades que quieran participar, y en sus 25 ediciones más de 140 países de los cinco continentes han mandado trabajos fílmicos a competición. Hasta la fecha han funcionado para los premios cinco secciones oficiales en el denominado concurso internacional: de Largometrajes de ficción (de 60 o más minutos), con los siguientes premios: el gran premio “Calpurnia” al mejor film, el premio del público a la mejor película, el premio especial del jurado, el premio a la mejor atriz y otro al mejor actor, el premio “Carlos Velo” al mejor director y hasta un premio de la “Cidade de Coruña” al mejor guión. Y los premios a Documentales de cualquier duración presentados a concurso: gran premio “Calpurnia” al mejor documental, premio “Cidade de Vigo” al mejor director y premio a la identidad y diversidad cultural. Además de los correspondientes trofeos y diplomas a los ganadores, el premio económico va desde los dieciocho mil euros del mayor a los mil quinientos del menor.

Además de realizadores y actores premiados de diversas nacionalidades, por el festival pasaron destacados directores y actores, y entre ellos hay que mencionar a Cuerda, Amenábar, Querejeta, Arribas, Sergi López, Fernando León, Olea, Imanol Arias, Carlos Iglesias, Angulo, Joaquim de Almeida, Concha Velasco, Berlanga, Armendariz, Juan Diego, Alex de la Iglesia, Diego Galán, Pilar Bardem, Pepe Sancho, Lola Herrera, Víctor Clavijo, Daniel Guzmán, Alfredo Landa, Lola Dueñas, Isabel Coixet, Carlos y Javier Bardem, Enrique Urbizu, y los gallegos Isabel Blanco, Uxía Blanco, Manuel González, Julio Casal, Xavier Bermúdez, Mamen Quintas, Rubén Rios, Xavier Villaverde, Pancho Casal, Patricia Ferreira, Ignacio Vilar, Miguel de Lira, Antón Reixa, Manuel Manquiña, Luis Tosar, Ledicia Sola, María Bouzas, Sonia Castillo y otros muchos.

Las etapas más brillantes del festival tuvieron como directores-gerentes a César Silva (que había sido directivo del cine club “Padre Feijóo”) y a Enrique Nicanor, el cual como director del festival en la edición de 2011 tuvo la feliz idea de dedicarle a Tagore, al cumplirse el 150 aniversario de su nacimiento (por lo que la Unesco declaró el 2011 como “Año Tagore”), una sección de homenaje, en la que se proyectaron cinco películas basadas en novelas y cuentos del gran escritor bengalí, y se estrenó el film “Shyama” realizado por Obhi Chaterjee, que es una ópera-drama tagoreana. Para este programa se desplazaron a Ourense desde el Reino Unido, el realizador del film y la actriz del mismo, Kaberi. En la actualidad, desde que en 2018 la responsabilidad del festival pasó a la Diputación, el director-gerente es el cinéfilo M. A. Fernández de la villa del Arenteiro.

Después de catorce años de vida, en 2009 el festival empezó a preocuparse del cine realizado en las aulas de nuestros centros de enseñanza. Con el acertado apoyo de la Secretaría General de Política Lingüística de la Xunta, en la décimo cuarta edición fue convocado el denominado “1º Certame de Cinema OUFF Escola” y la colaboración de la sección de Normalización Lingüística del Ayuntamiento de Ourense y también de la “Axencia Galega do Audiovisual”. En esta primera edición se presentaron a concurso 39 trabajos fílmicos realizados por escolares y docentes, de los que un jurado específico tenía que escoger cuatro para los presentados por centros de educación infantil y primaria, para otorgarles los premios primero a tercero y otro por el valor de su guión. Y los mismos para otros cuatro de centros de educación secundaria, pudiendo el jurado, si lo estimaba oportuno, otorgar también menciones especiales a algunos trabajos fílmicos. En el presente año 2020 hemos llegado a la edición número 11 de este interesantísimo certamen. Creado con el objetivo de impulsar el uso del idioma gallego entre la juventud y conocer la visión de esta sobre su entorno sociocultural.

(*) Educador Social y Animador Cultural.

Compartir el artículo

stats