En pocas ocasiones la nieve había estado tan cerca y, a la vez, tan lejos del alcance. La vida en confinamiento por la emergencia sanitaria del coronavirus regaló ayer un poco de luz, paradójicamente en un día invernal. Marzo se despidió con temperaturas frías y una imagen más propia de la anterior estación, cuando esta dura realidad del virus ni se nos imaginaba. En municipios situados a poco más de 500 metros de altitud cayeron ayer copos, con intensidad en algunos momentos. Nevó en Avión, Vilamarín, Nogueira de Ramuín, Celanova, Allariz, Cea, Xinzo de Limia, A Gudiña o Riós, por ejemplo. En el tramo de autovía A-52 entre estos dos municipios, la Dirección General de Tráfico activó el nivel verde, que exige circular con más precaución. La acusada reducción del tráfico por la reclusión del estado de alarma y el parón de buena parte de la actividad económica evitó que se registran incidencias en el asfalto.
El aviso por nevada en la autovía de As Rías Baixas, la principal vía de comunicación del sur de Galicia, pasó a nivel verde a las 12.07 horas del mediodía y afectó al tramo comprendido entre los kilómetros 130 y 155, en los municipios de A Gudiña y Riós, en ambos sentidos de la circulación, según la DGT.
Marzo dijo adiós con nieve, sin el menor atisbo primaveral, debido al desplome de las temperaturas. Cabeza de Manzaneda, con -8,4 grados, y Carballeda de Valdeorras, con 7 bajo cero, marcaron ayer las temperaturas mínimas de Galicia. En Calvos de Randín y Baltar el termómetro llegó a marcar - 4,7 y - 2,6 grados, respectivamente. Para hoy se espera un aumento moderado de las mínimas, según Meteogalicia.
