La Audiencia Provincial de Ourense juzga el jueves de la próxima semana a un hombre acusado de un presunto delito contra la salud pública, en la modalidad de tráfico de sustancias que causan un grave daño a la salud. En octubre de 2018, ingresó de forma voluntaria en el centro penitenciario de Pereiro de Aguiar. Al día siguiente de su entrada en la cárcel de Ourense, le intervinieron una riñonera con droga y pastillas.
La Fiscalía solicita una condena de 6 años de prisión más el pago de una multa de 800 euros. Según el relato de los hechos que expone el ministerio público en su escrito de calificación, el encausado llevaba en la bolsa, a las 21 horas del 9 de octubre de 2018, un trozo de resina de cannabis con un peso de 5,722 gramos -valorado en 32,61 euros-, así como 24 pastillas de trankimazin (un fármaco para el tratamiento de los estados de ansiedad), cuyo precio era de 110 euros, y una bolsa de polvo marrón. Una vez analizada en el laboratorio esta sustancia resultó ser droga, en concreto un total de 0,719 gramos de heroína, con un 47,81% de riqueza y un valor en el mercado de 63,73 euros, según los informes que constan en el procedimiento.
¿Para vender en la cárcel?
El ministerio público sostiene que la intención el encausado era distribuir todas estas sustancias en el centro penitenciario, traficando entre los presos. El encausado tendrá la oportunidad de dar su versión sobre los hechos en el interrogatorio del jueves, día del juicio en la Audiencia Provincial.
