La Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Judicial de Ourense mantiene un criterio sobre la trama de la comisaría provincial que no coincide en absoluto con el parecer de Asuntos Internos, una unidad que no ha sido vista con buenos ojos en la demarcación ourensana desde que a finales de 2015 desmanteló a la anterior unidad antidroga, con cuatro agentes acusados de proteger presuntamente a traficantes de la ciudad que eran sus confidentes.

La UDEV atribuye los anónimos y el robo de armas al policía fallecido de un disparo el 9 de abril de 2016, Celso B. A., y a los gemelos Roy y Bernardo D. L., detenidos en enero de 2018 tras 21 meses bajo secreto y todavía investigados por la jueza Eva Armesto como presuntos autores de un homicidio. En cambio, la unidad de Asuntos Internos considera que la muerte fue un suicidio. En el informe remitido a la magistrada que no ve pruebas de un crimen, la unidad afirma que ha detectado "diversos errores de apreciación de diferente consideración que afectan al contenido de las conclusiones" de un oficio de la UDEV de octubre de 2017, en el que la Policía Judicial de la comisaría de Ourense culpaba al fallecido y a los gemelos de la trama de las armas, los anónimos y de hacer búsquedas en bases de datos con claves ajenas para crear supuestas pruebas falsas con las que perjudicar, con un ánimo de "venganza", a otros compañeros, en especial al exjefe antidroga, Antonio R. F., uno de los acusados en la Zamburiña.

Asuntos Internos apoya al juez Leonardo Álvarez en las pesquisas que lleva a cabo sobre el robo de armas, tras hacerlo previamente en el marco de la Zamburiña, que surgió precisamente con más de una docena de escuchas tras desaparecer las pistolas. En febrero de 2019, Asuntos Internos presentó un informe al juez en el que contradecía el atestado de la UDEV que atribuía los anónimos y el robo de armas al policía fallecido y a los gemelo. En la causa sobre las pistolas -reabierta hace siete meses por el oficio de la UDEV y que sigue sin imputados-, el juez Álvarez pidió a la comisaría aclaraciones y espera otro nuevo dictamen de Asuntos Internos.

La unidad dice que la UDEV, con la que colaboró en su momento, no le remitió el controvertido oficio. Se enteró de él cuando fue requerida por el juez Álvarez para que contrastara varios puntos. El grupo VI de Asuntos Internos "quiere comunicar que se han detectado diversos errores de apreciación de diferente consideración que afectan al contenido de las conclusiones del referido oficio", como expresaron al juez Álvarez en su contrainforme de febrero. A la magistrada Eva Armesto le remiten ahora un dictamen de 167 páginas, en el que se inclinan por el suicidio de Celso: "A tenor de lo expuesto y del estado actual de la investigación, se presente un análisis de todas las diligencias recabadas".