El nombre del nuevo comisario de la Policía en Ourense saldrá del proceso de selección de aspirantes de la convocatoria abierta para renovar el mando en una demarcación incómoda, en los últimos años, debido a sus crisis internas sucesivas. La Dirección General elegirá al futuro jefe por libre designación.

Álvarez Valencia se despide

El nuevo jefe dará el relevo a Antonio Álvarez Valencia, natural de Muíños, quien asumió la plaza a mediados de 2016 y cuyo último día en el cuerpo, tras 41 años de servicio -pasando por Madrid, Barcelona y Tarragona-, es este domingo. Ayer tuvo una audiencia de despedida con el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro, y también acudió al edificio judicial para decir adiós de manera oficial a las principales autoridades de la judicatura. El día 1 de febrero se celebra una comida en su honor en el restaurante Cabú.

Ourense busca un comisario duradero, que tenga algo más de margen que los 2 años previos al retiro, como el saliente Álvarez Valencia y, antes, su predecesor Amable Valcárcel. "Esperamos que quien venga asuma con un aire nuevo la comisaría y tenga un recorrido razonable. Una persona que pueda dar un carácter a la organización y un impulso, para que impere la sensatez y el sentido común. Sería bueno que la comisaría sea conocida por sus actuaciones positivas y por la reducción de la delincuencia", resalta el subdelegado.

Castro cree que el comisario saliente ha llevado a cabo una tarea "digna, sin ponerse de perfil e implicándose con el trabajo policial" tras tener que "bailar con la más fea". El subdelegado respeta la presunción de inocencia de los investigados pero reconoce que "estamos hablando de una institución pública y una serie de funcionarios que velan por la seguridad de los ciudadanos, lo que siempre exige un plus".