"Estamos con velas y linterna, sin calefacción y comiendo frío, pues en el rural casi todos tenemos cocina eléctrica"

"Llevamos con cortes de luz alternos y durante horas seguidas, desde el jueves", explica Esther, vecina de Faramontaos, en el Concello de Nogueira de Ramuín uno de las decenas de pueblos que, en la noche de ayer seguían sin luz.

"Tuvimos que celebrar la fiesta vecinal del San Blas con un grupo electrógeno que trajo un vecino y hoy desde las cuatro de la tarde (por ayer) volvemos a estar sin luz, con velas, los focos de pilas y comiendo frío, pues en la mayoría de las casas del pueblo no hay butano sino vitrocerámicas", explica.

"Algún vecino no pudo cerrar ni las persianas porque también son eléctricas", añadió.

En Francelos, uno de los pueblos que ha vivido casi 24 horas sin electricidad, Marisol declaraba desde uno de los bares del municipio atestado de vecinos que celebraban con bullicio de fondo "volver a tomar un café caliente," señalaba que uno de los temores vecinales "es que tanto los que vivimos aquí como los que vienen los fines de semana, tienen los congeladores llenos, muchos con el resultado de las matanza, y esperamos que Fenosa arregle esto cuanto antes".