El parque de Carrileiros será un espacio etnográfico que tendrá más metros de vías

Con la intención de profundizar, conservar y divulgar la cultura ferroviaria, el colectivo Carrileiros de Foula inauguró en mayo de 2003 un parque ferroviario con un circuito para trenes de cinco pulgadas de unos 400 metros de recorrido. Ahora, siete años después, el Concello de Ourense se propone dotar a este recinto, situado en la parte alta de lo que en su momento fue el cuartel de San Francisco, de una nueva imagen y funcionalidad.

La institución municipal abrió ya el procedimiento para la contratación de las obras, por tramitación urgente, del "Proyecto de ampliación del parque de Carrileiros."

Con un plazo de ejecución de los trabajos de cuatro meses y medio, el proyecto supone una reforma integral del recinto y sus instalaciones. Según explicó el concejal responsable de Medio Ambiente de Ourense, Demetrio Espinosa, se llevará a cabo la demolición de la práctica totalidad de las instalaciones que hoy ofrece el recinto ferroviario de Carrileiros para hacer un nuevo parque. Con esta actuación, el Concello pretende hacer un espacio nuevo que se integre en un zona que ha ido creciendo en los últimos años, integrándolo, asimismo, con la zona del parque de A Canle recién construida, solventando así la precaria situación en la que quedó el espacio desde que se llevó a cabo la construcción de la Rúa da Canle.

La superficie total de la zona a intervenir es de 3.600 metros cuadrados, de los que 1.400 corresponden al parque de tren ya existente, 200 metros son de conexión con la acera de la Rúa da Canle y los otros 2.000 corresponden a la nueva ampliación del recinto.

Así las cosas, se creará un nuevo parque público que incluye la ordenación de los accesos rodado y peatonal, la supresión de las barreras arquitectónicas y problemas de seguridad, la creación de zonas de estancia y paseo, así como la mejora de la vegetación durante todas las estaciones del año.

Por otro lado, el proyecto municipal constituye también una mejora de los equipamientos de la asociación Carrileiros de Foula, de su museo de tren y el circuito ferroviario. De cara a ello, entre los trabajos se incluyen la ampliación del trazado de las vías del tren en 107 metros para disponer de un mayor recorrido, aprovechando para ello la desaparición de la vieja cancha deportiva, se construirá una nueva estación de tren de mayores dimensiones, un túnel y un nuevo elemento de atracción: una pasarela superior para que los visitantes que acuden al recinto puedan contemplar desde arriba el movimiento de los trenes.

El proyecto de Carrileiros se traduce en una reforma integral del recinto con ajardinamiento. Y, aunque se mantendrá la filosofía con la que se creó el parque, se busca dotar al espacio de un contenido con interés permanente, independientemente de su uso ferroviario, que se concentra sobre todo en los fines de semana. La idea del Concello pasa por hacer del parque un espacio etnográfico sobre la historia del tren en Ourense, en tanto que es una ciudad muy marcada por el ferrocarril.

En este sentido, el concejal de Medio Ambiente explica que "hay que hacer un lugar de diversión en el que el visitante puede conocer los entresijos del ferrocarril. Ir más allá del uso de los trenes y darle también un valor expositivo, etnográfico", con material que rememora la historia del tren.