El obispo de Ourense, Luis Quinteiro Fiúza, presidió ayer la Misa Crismal con la que arrancaron los actos centrales de la Semana Santa en Ourense y a la que asistieron 120 sacerdotes de toda la Diócesis. Se trata de una celebración solemne en la que se consagran y bendicen los óleos sacramentales, según explica el archivero de la Catedral, Miguel Ángel González.
El acto central se desarrolla durante la Eucaristía en la que los 30 litros de aceite puro cedidos por la empresa local Aceites Abril se distribuye entre las tres ánforas de plata que representan el Santo Crisma o Bautismo, la Confirmación y la Unción de Enfermos. Durante el transcurso de la Eucaristía, el obispo dirige una homilía muy especial a estos sacerdotes y arciprestes con referencias a la carta que el Papa remite a los obispos cada año por estas fechas. Por último, los 120 religiosos asistentes recibieron en sus pequeñas ánforas el óleo bendito que usarán en sus parroquias para los bautismos, confirmaciones y unción de enfermos. Este aceite, explica González, se va mezclando con otro para que dure hasta su renovación el año próximo.
Los actos litúrgicos continúan hoy con el Lavatorio de Pies en la Catedral como cita central. El “apostolado” está formado por doce miembros de la Adoración Nocturna.
