La provincia de Ourense registró ayer ocho nuevos incendios, tres de los cuales permanecían activos a las 19:00 horas, el registrado en Casaio, en Carballeda de Valdeorras, el de A Gudiña y el de O Pereiro, en A Mezquita.

A esa hora, en la extinción del fuego en Carballeda de Valdeorras participaba un hidroavión, tres helicópteros de transporte y extinción, uno de coordinación, dos motobombas, un técnico, un agente y dos cuadrillas. Este fuego surgió el viernes por la noche y quedó controlado a las pocas horas, pero rebrotó el sábado por la mañana con más virulencia, según informó la alcaldesa de Carballeda, María del Carmen González Quintela. Fue ella quien confirmó ayer por la tarde que "el fuego no es muy importante", ya que afectaba a monte raso y "no está cerca de casas".

En el incendio declarado ayer en A Gudiña, trabajaban a las 19:00 horas un helicóptero, tres motobombas, un agente y cuatro cuadrillas, mientras que en el de O Pereiro sólo permanecían a esa hora medios terrestres, una motobomba, un agente y dos cuadrillas.

Según informó el alcalde de A Mezquita, Francisco Montesinos, el fuego se declaró en una zona de monte bajo y "no estaba cerca de las casas". A última hora de ayer quedaba "controlado", según el alcalde, quien manifestaba su firme deseo de "que cojan de una vez a los que plantan fuego".

Por su parte, el alcalde de A Gudiña, Guillermo Lago, informaba que en el incendio en su concello "plantaron en tres sitios a la vez", en una zona que ya había ardido en días anteriores.

El fuego se declaró en una zona sin peligro para las viviendas y a última hora de ayer "los tres focos quedaron controlados", según indicó el propio alcalde, que agradecía la rápida intervención de las brigadas.

A lo largo de la jornada, quedaron controlados los fuegos de Castro (Laza), Touves (Cea), Rubiás (Calvos de Randín), Candás (Rairiz de Veiga) y el de Pontedeva.

En cuanto a los incendios registrados durante la jornada de ayer, la Consellería de Medio Rural contabilizó 31 fuegos forestales, que afectaron a 74,1 hectáreas de terreno, el 76 por ciento de toda la superficie quemada en Galicia durante el día.