Las propiedades de Benposta podrían ir a subasta pública, si prosperan diligencias y autos de embargo acumulativos por 3 millones de euros que pesan sobre los bienes del proyecto que un día fundó Jesús Silva. El último auto data del pasado mes de julio y fue emitido por el Juzgado de lo Social número 1 de Ourense, que solicita el embargo de los terrenos de la antigua Ciudad de los Muchachos, en respuesta a la solicitud de ex profesores y trabajadores de Benposta, que reclaman, con el aval de varios fallos judiciales favorables, los salarios que se les adeudan.

Las diferencias entre el fundador de Benposta Jesús Silva y los profesores y ex trabajadores, se han ido traduciendo en procedimientos judiciales, que se han materializado con sentencias favorables para la mayoría de los trabajadores, al entender que hubo despido improcedente y para los que se solicitan algo más de 2u0.000 euros de indemnización por impagos salariales y daños morales.

Luis Fernández Ramos uno de los abogados de Jesús Silva resta importancia a estos autos y resoluciones "son proceso acumulativas a lo largo del tiempo, pero que esperamos no salgan adelante, pues carecen en muchos casos de base firme y tenemos soluciones en perspectiva".

Mientras letrados y ex profesores y trabajadores en litigio con el fundador de Benposta y que reclaman representación en la antigua Asociación Ciudad de los Muchachos y la titularidad legal y moral de un proyecto del que se sienten "injustamente despojados", guardan total mutismo.

A los autos que se han ido emitiendo paulatinamente en respuesta a las sentencias salariales, se suma la diligencia de embargo de la Tesorería de la Seguridad Social reclamando 2,3 millones de euros a Asociación Benposta.

El galimatías legal al que se han visto abocados los profesores, para reclamar los salarios que legítimamente les pertenecen y Silva para preservar los bienes de la iniciativa que un día fundó, obligó a repartir la titularidad de los bienes. Así el embargo de la Seguridad Social afecta a los bienes de la Asociación Ciudad de los Muchachos, que sólo posee la gasolinera y el antiguo hotel, el resto, sobre todo los terrenos de Benposta, codiciados por los especuladores por su valor inmobiliario, estarían a nombre de la Fundación Benposta.

Pero la legalidad de esta Fundación también está en los tribunales, pues se creó tras disolver la antigua Asociación Ciudad de los Muchachos. Los primeros miembros de la directiva (los ex benposteños en litigio con Silva), afirman que esa disolución fue ilegal al no contar con la participación de los fundadores, y pidieron la anulacion de todas las decisiones adoptadas por una Fundación que ha asumido la titularidad de unas propiedades de bienes de Benposta y competencias que no le pertenecen.