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Tribuna libre

Antonio Román, realizador ourensano de cine

Se está hablando estos días de la crisis del festival ourensano de cine, que en su día había sido diseñado e iniciado por Eloi Lozano Coello, al que lo bautizó con las siglas OUFF ("Ourense Film Festival"), para ser organizado por el área de cultura del ayuntamiento de la ciudad. Con altibajos sucesivos se fue celebrando cada año en el otoño. Puestos a destacar pensamos que lo más interesante de las últimas ediciones fue la sección "OUFF Escola", fomentando la realización cinematográfica en las aulas de las escuelas de nuestra Comunidad Autónoma. Sin embargo se hizo muy poco para difundir las realizaciones de los cineastas ourensanos, que tuvimos a lo largo de la historia. Es cierto que no hemos tenido en Ourense y provincia muchos realizadores cinematográficos, pues nuestros artistas importantes se han dedicado más a la pintura y a la escultura, e incluso a la música. Entre los cineastas ourensanos que hemos tenido debemos mencionar a Carlos Velo, que se inició en el cine cuando estudiaba en Madrid, pero la mayoría de su filmografía la desarrolló en México, en donde dirigió una importante escuela de documentalistas. No sería justo si no mencionásemos a Chano Piñeiro, por desgracia muerto prematuramente, pero que nos dejó esa hermosa película que es Sempre Xonxa y el cortometraje Mamasunción. En la lista hay que incluir al alaricano José Suárez, que, además de grande fotógrafo, fue cineasta, realizando algún cortometraje en nuestra tierra y varios filmes en Buenos Aires (Argentina). A él le dedicamos un artículo no hace mucho en esta serie. E incluir también al propio Eloi Lozano, también fallecido no hace mucho, que realizó varios e interesantes cortometrajes sobre arte y artes populares y algún largometraje. No queremos olvidarnos tampoco de Miguel Castelo, nacido en Ourense en 1946, felizmente vivo, y que realizó aquel hermoso cortometraje en los setenta titulado O pai de Migueliño, basado en un relato de Castelao, y algún largometraje. Sin embargo, desde nuestro punto de vista, el más importante realizador de cine que hemos tenido los ourensanos, con una amplísima y rica filmografía, fue Antonio Román (1911-1989), que pertenecía a la familia de farmacéuticos de la farmacia Román de la Alameda.

Nuestro cineasta tenía un nombre largo y completo, Antonio Aurelio del Sacramento Fernández-Román García de Quevedo, pero es conocido como Antonio Román. Nació en nuestra ciudad el 9 de noviembre de 1911 y falleció en Madrid el 16 de junio de 1989, a la edad de 78 años. Su esposa se llamaba Yvonne Bastién. Sin terminar sus estudios de Farmacia, se trasladó a Madrid para realizar trabajos de crítica cinematográfica en varias revistas. En 1934 realizó sus primeros cortometrajes profesionales y en 1941 su primer largometraje titulado Escuadrilla. Desde octubre de 1939 residió permanentemente en Madrid. Su pasión siempre fue el cine, y recibió muchas influencias del expresionismo y de los grandes realizadores rusos, especialmente de S. M. Eisenstein. En su momento en una entrevista periodística en 1963, llegó a decir: "Soy director de cine, profesión por la cual he sentido desde muy niño intensa vocación, y si en algunas circunstancias he ejercido el periodismo y la crítica cinematográfica fue por considerarlos caminos que me conducirían al fin propuesto; como así ha sido. Por ello he decidido instalarme en un lugar adecuado al logro de mis intenciones, ya que sólo en ciudades de la importancia de Madrid o Barcelona existe en España el ambiente y la industria de la producción cinematográfica".

Pese a residir en la capital de España, nunca olvidó su ciudad de nacimiento y en esta misma entrevista comenta: "Ourense es un nombre que suena distinto a todos los demás y que produce un alegre sobresalto cada vez que se oye o se ve escrito. Un punto negro hacia el que corre la vista lo primero cada vez que, por cualquier causa, se mira un mapa de la península. Un lugar donde no nos cuesta gran trabajo creer que seguimos habitando en cuerpo, ya que en alma no lo hemos abandonado. En Ourense he vivido los primeros veinte años de una vida pegada a sus calles y a su paisaje. De ella, lo que más vivo conservo es el temor que habían logrado infundirnos a los niños de mi época a caernos por "La Barronca", el terraplén que existía al final de la Alameda y que finalizaba al borde del Barbaña. Sigo manteniendo contactos con mi pueblo por la participación en el negocio familiar y la familia que tengo en la Ciudad de las Burgas". Al ser preguntado sobre la relación que tenía con otros ourensanos que vivían en Madrid, comenta: " Luis Trabazo, Ramón Cid y, sobre todo, Adolfo Prego, son los orensanos de aquí que encuentro más a menudo dentro de mi vida de relación, y es muy difícil que cada vez no surja el recuerdo o la frase que encadene nuestra conversación sobre nuestro pueblo. De mi ciudad lo que más me gusta es lo que hay entre "El Posío" y "El Puente", entre Montealegre y Piñor".

Román pertenece al grupo de directores renovadores del cine español de posguerra, junto con Rafael Gil y José Luis Sáenz de Heredia. Sus películas fueron en numerosas ocasiones galardonadas y premiadas, como señalaremos más adelante. Aprovechando el momento político, realizó en 1943 los dos filmes más arriesgados y personales de su filmografía, titulados Intriga y La casa de la lluvia. Pero, el fracaso comercial de los mismos y el escepticismo crítico con que fueron recibidas las dos propuestas, precipitaron la vuelta a proyectos más comerciales como Lola Montes y Los últimos de Filipinas, film este con el que alcanzó un éxito enorme, siendo galardonado en 1946 con la Medalla del Círculo de Escritores Cinematográficos a la mejor dirección por esta película.

Antes de fallecer en 1989 colaboraba con Radio Exterior de España, y preparaba con otros realizadores y cineastas la organización de un trimestre de cine español en la localidad madrileña de Majadahonda. Dado el carácter propagandístico de sus obras, después de la guerra civil, sus películas obtuvieron subvenciones, ayudas y premios estatales, razón por la cual quizás no se haya valorado suficientemente su trabajo desde el punto de vista técnico y fílmico. Y fue más valorado fuera, al obtener varios premios internacionales, como el "Olivo de Oro" del Festival de Cine de Humor de Bordighera (Italia) por Bombas para la Paz, y el "Arpa de Plata", por Pacto de silencio, en el Festival de Cork (Irlanda). En 1962 fue Premio Revelación en el Festival de San Sebastián por El sol en el espejo.

Antonio Román llegó a realizar a lo largo de su vida más de 35 filmes, entre cortometrajes y largometrajes. Reseñamos a continuación los títulos de los mismos, incluyendo el año en que fueron filmados. En 1930 dirigió Sandra, y al año siguiente, 1931, al inicio de la 2ª República, el titulado Ensueño. Los siguientes filmes rodados fueron Canto a la emigración (1935), Ciudad encantada (1936), Barcelona o ritmo de un día (1939), Mérida (1940), Al borde del gran viaje (1940), De la Alhambra al Albaicín (1940), O carro e o home (1940), un lindísimo documental con guión de su amigo Xaquín Lourenzo, que le puso la voz y que fue recuperado por Eloi Lozano, al encontrar el copión en el Museo de Ourense, y luego la cinta en DVD fue editada por el Museo do Povo Galego de Compostela. También Escuadrilla (1941), Boda en el infierno (1942), Intriga (1943), La casa de la lluvia (1943), Lola Montes (1944), Los últimos de Filipinas (1945), Fuenteovejuna (1947), La vida encadenada (1948), El amor brujo (1949), Pacto de silencio (1949), El pasado amenaza (1950), La fuente enterrada (1950), La forastera (1951), Último día (1952), Congreso en Sevilla (1955), La fierecilla domada (1956), Dos novias para un torero (1956), Madrugada (1957), Los clarines del miedo (1958) y Bombas para la paz (1959), película esta recientemente repuesta en televisión, en la que Román apuesta por un mundo en paz, con una propuesta fílmica de tipo humorístico, con un guión fantástico, cuyo mensaje vale perfectamente para los tiempos actuales en los que se encuentra el planeta. Los últimos 6 filmes realizados por Román fueron: Mi mujer me gusta más (1961), El sol en el espejo (1963), Pacto de silencio (1963), Un tiro por la espalda (1964), Ringo de Nebraska (1966) y El mesón del gitano (1969).

En el año 2000 la Xunta de Galicia le editó a Pepe Coira, que fue director del CGAI de Coruña, una monografía titulada Antonio Román: Director de Cine. En más de 300 páginas Coira escribe sobre la vida, la obra y la filmografía de Román, llegando a ser este uno de los más completos estudios de los pocos que existen, sobre la figura del cineasta ourensano.

Según nuestro gusto, las películas de Román que por sus valores fílmicos y por su mensaje y contenidos merecen ser destacadas, son las siguientes: O carro e o home, rodada en 1940 en tierras ourensanas de Lobeira, siendo una especie de biografía del carro de vacas o bueyes, desde el roble que se corta para hacer las ruedas y el "chedeiro", por el carpintero o "fragueiro", su uso por los campesinos en las diversas labores agrícolas, y su "muerte" después de su larga vida en tierras del rural. Otra película interesante es Bombas para la paz, realizada en 1959, en la que, antes de su muerte, un científico revela a su ayudante la fórmula incompleta de un sensacional descubrimiento: una sustancia que vuelve pacíficos a los seres más belicosos. La sustancia es una auténtica bomba y el científico le encarga que la utilice para conseguir la paz en el mundo. Tras realizar diversas pruebas, el joven viaja a París donde se va a celebrar una conferencia a la que asistirán los dirigentes más importantes del mundo. Su intención es arrojar la "bomba para la paz" en la conferencia. La otra película es Los últimos de Filipinas, realizada en 1945 y en la que, con el desastre del 98, España pierde sus últimas colonias. El capitán español Las Morenas, comandante del destacamento de Baler, en las islas Filipinas, observa síntomas de una inminente insurrección en su distrito. En espera de los acontecimientos, decide recluirse con su tropa y, tras estallar la revolución, esta situación se prolonga durante un año. Animamos al Cine Club "Padre Feijóo" para que en algún momento organice un ciclo cinematográfico dedicado a Antonio Román, realizando una selección de sus filmes más atractivos e interesantes.

(*) Educador Social y Animador Cultural.

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