Pablo López visitó este miércoles 'El Hormiguero' para hablar de sus 10 años en el mundo de la música que está celebrando con su nueva gira, que arrancó el pasado 24 de febrero. El artista, que ya es un habitual del programa, habló sobre su música y el momento profesional que está viviendo. Pero también hubo tiempo para hablar sobre algunas de sus experiencias más personales del pasado de las que aprendió valiosas lecciones.

En concreto, el artista habló sobre un negocio que puso en marcha junto a su hermano y que casi le cuesta la ruina. "Monté un bar con él. No recomiendo montar un bar con vuestros hermanos o al menos con el mío. Se llamaba 'el 47'. Fue un máster. Cuando salimos pensábamos: 'Esto lo puedo hacer yo'. ¡Para qué ir a uno si yo me lo podía montar! El caso es que lo teníamos lleno, que cabían unas 80-90 personas, pero una ruina absoluta", confesó.

"Fue una época bonita porque me enseñó que realmente te tienes que dedicar a lo que te gusta. Eran muchas tareas complicadas. Ahora nos reímos, pero fue la juerga más cara de mi vida", dijo ya con humor tras el paso del tiempo.

Una decisión de la que sacaron un gran aprendizaje y que les quitó las ganas de seguir emprendiendo, al menos en ese terreno.