Cangas amanece llena de basura tras una noche con las calles de la movida abarrotadas

El primer sábado después de los exámenes de la ABAU (Avaliación de Bacharelato e Acceso á Universidade) se preveía positivo para el sector del ocio nocturno. Y las expectativas se cumplieron con creces. Los locales de las canguesas Avenida de Marín y Rúa Ferrol estuvieron abarrotados hasta altas horas de la madrugada y las calles estaban llenas de jóvenes que disfrutaban del fin de las responsabilidades académicas y sobre todo de la llegada del verano meteorológico.

La noche, pese a ese gran ambiente y a la cantidad de gente, se saldó sin incidentes de consideración. La Policía Local de Moaña, eso sí, realizó múltiples controles de alcoholemia a los conductores que atravesaban de madrugada las calles de esta villa, detectando dos positivos, uno arrojó un resultado de 0,43 y el otro 0,84, por lo que se enfrenta a un presunto delito contra la seguridad viaria. Otro conductor dio positivo en consumo de drogas. En Cangas los agentes también detectaron dos alcoholemias y otro positivo en drogas.

Eso sí, las consecuencias se pudieron ver a primera hora de la mañana, en plena jornada electoral. La zona de la movida amaneció llena de basura, con vasos de plástico y de cristal tirados en las aceras, en las zanjas de recogida de aguas e incluso en la propia calzada. Además de decenas de botellines de cerveza que incluso rodaban por las pendientes. A las puertas de algunos de los locales los viandantes caminaban entre miles de colillas de cigarros, como se quejaban varios vecinos que hacían fotos a la basura. Igualmente algún visitante que se dirigía, arrastrando las maletas, hacia un hotel de la zona, mostraba su asombro por encontrarse a una Cangas con ese aspecto.

Aunque los incívicos fueron una minoría en una noche con tanto ambiente en Cangas, no dejaron libres ni a los coches, pues de mañana era habitual ver vasos y botellas encima de techos y maleteros de vehículos estacionados en el entorno.

La basura permaneció en la zona de la movida durante toda la jornada dominical. Los únicos que estaban limpiando de mañana eran los trabajadores contratados para poner a punto los pubs y discotecas, que extendían el fregado al tramo ubicado inmediatamente delante de la puerta del local en cuestión.

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