Moaña valora dejar la vivienda de los astilleros de Seara para aula de interpretación o turismo

La casa estuvo habitada hasta el año pasado y forma parte de la carpintería de Carlagho | El gobierno descarta que siga como vivienda ya que la ley impide el uso habitacional

Recinto del astillero de Casqueiro, la carpintería de Carlagho y la casa que era vivienda. |  // GONZALO NÚÑEZ

Recinto del astillero de Casqueiro, la carpintería de Carlagho y la casa que era vivienda. | // GONZALO NÚÑEZ / Cristina González

El proyecto constructivo para la rehabilitación de las antiguas carpinterías de ribeira de Seara, en Moaña –Casqueiro, en ruinas tras el incendio de 2017, Carlagho, deteriorada aunque con actividad por parte de la Asociación de embarcaciones tradicionales Sueste– permanece en fase de licitación por importe de 759.878 euros hasta el lunes 13 de mayo cuando acaba el plazo para que las empresas presenten sus ofertas. En 12 meses, según el plazo de ejecución, las carpinterías de Seara quedarán rehabilitadas para uso museístico y social. Falta que el Concello concrete el uso que le dará al antiguo aserradero de Carlagho, que fue reconvertido a vivienda del vigilante y siguió con uso residencial hasta final del año pasado cuando falleció la mujer que habitaba la casa, con fachada a la calle Concepción Arenal.

El Concello siempre respetó el uso residencial que tenía esta construcción para no afectar a su moradora cuando solicitó en Costas del Estado la concesión del dominio público marítimo terrestre de Seara, que le fue otorgada en mayo de 2021, con destino a paseo marítimo y rehabilitación de las carpinterías de ribeira. Hubo un pacto en la corporación de no perjudicar a la persona que vivía en la casa, como así se respetó.

El Concello es titular desde que obtuvo la concesión y por un plazo de 15 años prorrogables hasta 30, de todo este dominio público de Seara. La concejala de Patrimonio de Moaña, y segunda teniente de Alcaldía, María Ortega, reconoce que cuando se hizo el proyecto de rehabilitación de las carpinterías, la casa seguía habitada y no se contempló ningún uso. Confirma que, por el momento, no tienen nada decidido respecto al uso, sí que descarta que pueda seguir teniendo un empleo residencial para alquiler social, ya que la Ley de Costas impide el uso habitacional, por lo que apuntan más a un aula de interpretación para información turística.

La concejala de Patrimonio, que gestionó a través del Grupo de Acción Local Pesquera (Galp) una subvención de 200.000 euros para la rehabilitación de los dos astilleros, reconoce que en el gobierno local estuvieron hasta ahora centrados en sacar adelante la obra de rehabilitación para abordar luego la finalización del paseo. Es cierto que la finalización del polémico paseo de Seara, que en el nuevo proyecto incluye una gran plaza en el frente de los astilleros con la calle Concepción Arenal, ha quedado para una segunda fase.

El Concello de Moaña recibió de Costas una concesión de 4.495,62 metros del dominio público maríitimo-terrestre de los que las carpinterías ocupan 502,66 metros cuadrados. La de Casqueiro, que tras el incendio sólo quedan los muros exteriores de piedra, ocupa 235,51 y la de Carlagho, de 271,15 consta de dos edificaciones: la dedicada a carpintería de ribeira y la del aserradero que se transformó en la mencionada casa del vigilante.

Estas carpinterías formaron parte de una concesión anterior, otorgada por Orden Ministerial de 7 de octubre de 1942, que caducó en octubre de 2017 y la zona revirtió al Estado el 6 de julio de 2017.

La rehabilitación de las carpinterías contempla su retranqueo en la parte del mar para permitir el tránsito litoral. La de Casqueiro recuperará su estructura de madera; y en la de Carlagho se hará conservación, mejora de fachada y estructura de madera. En ambas se protegen las rampas varadero, de tal manera que cuando se acometa la finalización del paseo, éstas se salvarán con pasarelas móviles con mecanismos de apertura motorizados.

La actividad de estas carpinterías, según los antecedentes históricos que obran en el proyecto de rehabilitación, datan de 1942 y se desarrolló con diferente intensidad a lo largo del siglo XX. En el ámbito había un tercer astillero que fue demolido por Costas en 2010. Casqueiro ya había sufrido un incendio en la antigua carpintería en el lugar das Pillas, junto a la Xunqueira, que le obligó a reubicarse en la concesión de Seara desde 1941.

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