Reducir a tres meses o incluso a menos el plazo para conceder una licencia urbanística. Ese es el objetivo que se ha marcado el Concello de Bueu después de que ayer se confirmase la finalización del proceso selectivo para incorporar a una técnica de administración general que reforzará el departamento de Urbanismo que dirige Martín Villanueva. El edil buenense confía en que la tan ansiada contratación sirva para desatascar este área y agilizar la tramitación de licencias, que actualmente puede suponer un tiempo de espera de más de seis meses.
Y es que el proceso de concesión de una licencia supone una doble tarea. La parte técnica recae en el arquitecto a fin de comprobar que todo se adapta a la normativa urbanística (PXOM, Lei do Solo, diferentes reglamentos...) pero también existe una parte jurídica. Y ahí es donde el departamento de Urbanismo carecía de una persona específica para esas funciones. Así, durante años se recurrió a una asesoría externa que acudía una o dos veces por semana al concello, y posteriormente esas labores las asumió de forma directa la secretaria municipal, al considerar que la tarea debía recaer en un funcionario. Sin embargo, los avances eran discretos debido al volumen de trabajo que soporta Secretaría en todo tipo de cuestiones.
Será ahora, con la llegada de este refuerzo, cuando se pueda dar una salida más ágil a todos los expedientes. “Se trata de una técnica de categoría superior con formación de abogacía, que se encargará de las cuestiones de carácter jurídico”, explica Villanueva, que matiza que aunque las licencias de construcción son la parte más visible del departamento, este asume también otras cuestiones de relevancia como la limpieza de fincas y montes, el mercadillo, el sector del taxi o la disciplina urbanística. En definitiva, un importante volumen de trabajo cuya gestión se ha visto perjudicada tanto por la ausencia de este funcionario de perfil jurídico como por el periodo en el que Bueu se quedó sin arquitecto, desde la marcha del anterior a la llegada del actual.
Martín Villanueva se muestra convencido de que esta incorporación “permitirá dar un salto de calidad al concello. Venimos de una época gris con logros bonitos como la aprobación del Plan Xeral pero gris en el aspecto administrativo por la acumulación de expedientes, lo que ha generado un retraso que lamentamos”. El edil admite que “cuestiones que eran sencillas, que se podrían resolver en un día, quedaban estancadas durante un par de semanas”, con el descontento tanto de los vecinos como del propio personal municipal, que se veía superado por la situación.
Paradójicamente, el confinamiento de marzo supuso un respiro para el departamento, que puedo dar salida a buena parte del trabajo acumulado. “Recuperamos bastante, ya hemos cogido mucho aire”, señala el concejal de Urbanismo de Bueu, que también añade que la tarea en su departamento se ha visto incrementada desde la aprobación del PXOM. “Raro es el día que no vengan dos o tres personas a preguntar por alguna parcela o situación en concreto”, afirma. Por ello, su máximo objetivo es “entrar en una dinámica normal para dar un buen servicio, porque el último año fue de un gran estrés”.
