Comenta Francisco Piñeiro que en Nerga se abandonaron las fincas porque no se podía construir, se vedieron muy baratas y al poco estaban ocupadas por chabolas y caravanas. Asegura que hace 14años se derribaron algunas, pero después fueron legalizadas. "Chabolismo es lo que trajo también la Red Natura, que a todos nos cogió por sorpresa. Muchos de nosotros estábamos en el mar cuando pasó todo", manifiesta el presidente de la Asociación de Vecinos de Nerga, que añade que la gente de la aldea tuvo que ir a Cangas a comprar pisos.