La presencia de autoridades locales, con la alcaldesa en funciones al frente, Mercedes Giráldez (BNG) y con testigos tan eminentes como el ex fiscal jefe del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), Carlos Varela, o el presidente de la Sección Segunda de la Audiencia de Pontevedra, Xosé Xoán Barreiro Prado, además del director xeral de Política Lingüística, Valentín García, tuvo lugar ayer el acto que conmemora la primera sentencia en gallego en los juzgados de Cangas. Ejercía de presentador del acto el concejal de Normalización Lingüística, Héitor Mera, quien habló de la inocencia de las lenguas y de aquellas otras variables, como la política, que afectan a esa más que probada inocencia. Aseguró que actos como el de ayer sirven para ir más allá del ejercicio de su profesión, que tiene que ver con la responsabilidad y el ejemplo.

Tal y como había adelantado, Dalila Dopazo, su discurso fue reivindicativo. No le hizo falta papel a esta magistrada que ejerce ahora en Lugo para agradecer la colaboración de los que en aquel momento estaban a su cargo, para felicitar al Concello y a la Xunta de Galicia, a la que dio un tirón de orejas por la falta de un programa informático en gallego. Ella misma se mostró sorprendida que su sentencia fuese la primera en gallego y tuviese que ser en 2004. Considera que es una anormalidad del país en el que vivimos y culpó de ello a la falta de voluntad política. Habló de la fama de "guerrilleiros" de las gentes de O Morrazo, "de xente que sabe defender os seus dereitos e mudar as cousas". Cuando se refirió a voluntad política mencionó la modificación de la que denominó "sacrosanta constitución, que non se pode tocar, pero despois tócase para incluir en ela o déficit público".

Alejandro Couselo utilizó ese tono pausado que le hizo famoso en Cangas. Dijo que quería que quedara constancia de su nombre apareciera en una placa por hacer algo que él considera natural, que es utilizar su idioma. Afirmó que lo difícil no es emplear el gallego, sino resolver los asuntos. "Cando me pregunta porque me empeño, digo para min, porque non quere parecer fachendoso cara os demáis, que porque me peta".

Intervino también en el acto el director xeral de Política Lingüística, Valentín García. Fue consciente de que aún queda mucho por recorrer para alcanzar la igualdad entre los idiomas en la administración de justicia. Manifestó que, en parte, era por el propio entramado de la citada administración y fue el primero en señalar la necesidad de cambiar el programa Minerva que ahora mismo obliga a los funcionarios a escribir todo en castellano. Adelantó que pronto estaría en marcha el Portal Xurídico Gallego.

Por su parte, la alcaldesa en funciones, Mercedes Giráldez, insistió en que la lengua tiene que dejar de ser un elemento de conflicto social y mencionó el informe europeo en el que hace referencia al poco uso del idioma gallego en la administración de justicia.

En el acto, organizado por Irmandade Xurídica Galega y el Concello, había abogados y procuradores, además de funcionarios que prestan su servicio en los juzgados de Cangas.