Juan Calvo Cangas
La empresa Pridesa Proyectos y Servicios, que recientemente fue absorbida por el grupo Acciona, solicitó el pasado día 25 de noviembre la suspensión durante 60 días del procedimiento del contencioso administrativo abierto contra el Concello de Cangas por una cuestión de desequilibrio económico en relación a la explotación de la estación depuradora (EDAR). En la solicitud al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Pontevedra, se hace mención a que "dadas las reuniones que se vienen manteniendo entre las partes y dada la posibilidad de solucionar extraprocesalmente... es por lo que de común acuerdo interesamos la suspensión del procedimiento".
La fecha de la misiva es anterior al inicio del cobro de los recibos pendientes desde 2005 y que suscitó tanta polémica en Cangas. Cabe señalar que las negociaciones que se emprendieron fueron para la resolución amistosa del contrato que une al Concello con Acciona. Fue en noviembre de 2006 cuando Pridesa comenzó este proceso judicial, presentando una reclamación de desequilibrio económico.
La firma se quejaba de la no actualización de las tarifas y después cuando las subió de que no era lo suficiente, además del incremento del gasto "no concebido originalmente". El expediente tiene datos tan curiosos como que al comparar los volúmenes de agua tratada por la planta y lo facturado por Aqualia, concesionaria de la distribución de agua en el municipio, se percibe una entrada no procedente del consumo urbano, que es la base del diseño de la EDAR de Cangas. Así, durante el primer semestre de este año, el volumen facturado por Aqualia fue de 887 millones de metros cúbicos de agua, mientras que la EDAR trató 1.387.
