Más de la mitad del Parlamento Europeo -en particular la izquierda y los liberales- reclamó ayer a su presidente, Antonio Tajani, que dimita si no retira unas declaraciones hechas el miércoles en las que relativizaba el daño causado por la dictadura del fascista Benito Mussolini (1922-1943), al asegurar que "para ser honestos" hay que aceptar que hizo también "cosas positivas".
En una entrevista radiofónica, Tajani se refirió en varias ocasiones a las "cosas positivas" que promovió Mussolini en su dictadura, sobre todo en materia de infraestructuras como carreteras, puentes, edificios y centros deportivos. "No fue un campeón de la democracia, pero algunas cosas hizo. Hay que decir siempre la verdad, si no, somos deshonestos", indicó Tajani, pidió que los juicios a la Historia sean "objetivos".
El eurodiputado del grupo Socialistas y Demócratas Josef Weidenholzer pidió explicaciones a Tajani, ausente, y avisó de que su grupo se reserva el derecho a tomar medidas si Tajani se mantiene en sus declaraciones. "No es la primera vez que hace interpretaciones de Historia".
El líder de los Liberales europeos, Guy Verhofstadt, instó a Tajani a "retirar sus palabras, disculparse y empezar el trabajo" parlamentario, tras considerar "absolutamente estúpido" que la polémica se mezcle con el debate y la campaña electoral. Para el copresidente de los Verdes, Philippe Lamberts, son declaraciones "indignas" del presidente de una institución europea, ya que "dan crédito a la tesis de que puede haber cosas buenas en regímenes que destruyen la democracia". Por ello, su grupo exigió a Tajani que rectifique o dimita.
La Izquierda Unitaria fue el único grupo que exigió directamente la dimisión. "Es inconcebible que este Parlamento democráticamente elegido, cuyo objetivo principal es evitar que se repita el odio y el antisemitismo, sea presidido por un hombre que se refiere a Mussolini minimizando lo que pasó entonces", alertó el eurodiputado Gabriel Zimmer.
Tajani ha respondido a las críticas declarándose un "convencido antifascista" y asegurando que se han manipulado sus palabras. "La dictadura fascista, las leyes raciales y las muertes que causó son la página más negra de la historia italiana y europea", sentenció.
