El Gobierno de Malvinas ha dado un paso de gigante para la creación de su nuevo puerto, que beneficiará a la importante flota pesquera gallega que faena en sus aguas. La Administración del archipiélago ha encargado el diseño y construcción de las nuevas instalaciones a la firma británica BAM Nuttall, que inicia así un estudio para el establecimiento de la nueva obra en el entorno de la capital, Stanley. Para el responsable del Ejecutivo malvino, Barry Rowland, la rúbrica supone "el primer paso" hacia ese nuevo puerto, un proyecto que llevan años tramitando y para el que llegaron a pedir consejo a la Autoridad Portuaria de Vigo. La noticia, importante para los buques de capital gallego que cada año viajan hasta las islas, ha pillado a la flota viguesa en las islas, ya que el próximo lunes empiezan la primera campaña del año del calamar.
"Las actuales instalaciones", indicó Rowland al medio local Penguin News, "se están acercando rápidamente al final de su vida útil". Según clarificó, las nuevas instalaciones configurarán "un activo indispensable" de cara a respaldar la economía de las islas, que vive en gran medida de los réditos que deja la industria pesquera y también la de los sectores del turismo y petróleo, con prospecciones al norte del archipiélago. De hecho, el nuevo puerto también contemplará "las necesidades" futuras que pueda tener Malvinas en estos ámbitos.
En la actualidad el archipiélago cuenta con un puerto provisional (denominado, Fipass, siglas en inglés para puerto provisional de Malvinas y sistema de almacenamiento) que con los años se ha ido quedando pequeño. La flota pesquera gallega habitualmente fondea en las inmediaciones de Stanley y las descargas se hacen directamente en los cargueros que traen el pescado a Vigo (unas 100.000 toneladas anuales).
El Gobierno malvino lleva años realizando estudios para la creación del nuevo puerto e incluso consultó a la Autoridad Portuaria olívica al entender que se trata de un ejemplo a seguir. A comienzos de 2017 una comitiva de las islas visitó las instalaciones viguesas con el objetivo de reproducir a escala la logística de Guixar. En noviembre de aquel año la jefa de explotación del Puerto vigués, Ana Ulloa, y la directora, Beatriz Colunga, visitaron Malvinas y realizaron una serie de recomendaciones sobre los requisitos que deberían tener los nuevos muelles.
Proceso
La firma BAM Nuttall (filial británica del grupo holandés Royal BAM Group) se erige ahora como socio para el desarrollo del proyecto, cuya formalización se llevará a cabo a finales de marzo. Según recoge MercoPress, la iniciativa constará de tres etapas: la creación de una diseño conceptual, que deberá ser revisado por el Consejo Ejecutivo de Gobierno isleño; la aprobación de los presupuestos y planos para la construcción y, finalmente, las obras por fases.
Para ello, la construcción será "programada" para que las operaciones que actualmente se realizan en el Fipass se vayan trasladando al nuevo puerto. De hecho, se prevé que los bloques que forman el actual muelle (concebido en su día como provisional) sean retirados de la zona. Por el momento el Gobierno no ha desvelado la inversión prevista.
