El nuevo ministro de Infraestructuras de Portugal: vuelve el privatizador de la TAP cercano a Chega y Ayuso

El futuro político de Portugal se aclara, pero las dudas sobre la línea de Alta Velocidad entre Lisboa, Oporto y Vigo no se disipan de forma contundente. Definido como uno de los perfiles más políticos dentro del nuevo Gobierno de Luís Montenegro, Miguel Pinto Luz (Lisboa, 1977) será el responsable de poner en marcha de forma definitiva el tren de Alta Velocidad en el país vecino.

El actual vicepresidente del Partido Social Democrata (PSD) y vicealcalde de Cascais regresa al Ministerio de Infraestructuras y Vivienda, donde ya ejerció como secretario de Estado durante 27 días en 2015. Bajo la administración de Pedro Passos Coelho fue responsable de la venta de TAP a Atlantic Gateway, liderada por David Neeleman (fundador de la estadounidense low cost jetBlue Airways y dueño de la Azul Linhas Aéreas Brasileiras) y por Humberto Pedrosa(CEO del Grupo Barraqueiro de transportes).

Ahora deberá enfrentarse de nuevo a la venta de la aerolínea lusa de bandera después de su nacionalización, así como de uno de los grandes problemas del país vecino: la nueva ubicación del Aeropuerto de Lisboa, proyecto que suma 50 años pendiente de una decisión final y que ya hizo peligrar a sus antecesores.

Pinto Luz optó a la presidencia del partido de centroderecha en 2022 contra Rui Río y el actual líder, Luís Montenegro, de quien se ha convertido en su mano derecha.

Sus tesis políticas abogan por un acercamiento a la formación de ultraderecha de Chega y cuenta con un libro (Voltar a Acreditar na Política) prologado por Isabel Díaz Ayuso. Durante las dos décadas en la Cámara Municipal de Cascais ha ocupado diversos puestos de responsabilidad con polémicas en urbanismo y dejando un importante problema de vivienda.

Entre sus últimos "hitos" antes de entrar en el nuevo ejecutivo que tomará posesión esta semana destaca su participación en las elecciones como cabeza de lista por el distrito de Faro, causando un gran revuelo en la región al ser considerado un "paracaídista".

Horas antes de conocerse su nombramiento aprovechó para desactivar su cuenta en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.