Atribuyen un delito de tentativa de asesinato al exgrapo por los disparos en Castrelos

El pasado 14 de septiembre la Policía Nacional detenía a un exmiembro del GRAPO por disparar hasta en dos ocasiones a un joven en las inmediaciones del parque canino de Castrelos. Se trata de Manuel Baña Gil, de 69 años, con varias condenas a sus espaldas que, a juicio de los agentes, ponen de manifiesto su “carácter violento”. Con toda seguridad, en pocos meses se enfrentará a un nuevo juicio que lo sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, donde se enfrentará a un delito de asesinato en grado de tentativa. Y es que este es el ilícito que se el atribuye en su procesamiento tras la práctica de testificales, visionado de los vídeos y otras diligencias.

Videoconferencia desde A Lama

Se trata del delito más elevado al que podría enfrentarse solicitado por las partes, en este caso la Fiscalía y la acusación particular que representa al joven víctima de los disparos, castigado con penas de hasta 15 años de prisión. Este pasado viernes tuvo lugar la indagatoria, que es el interrogatorio judicial del investigado tras su procesamiento. El trámite se realizó por videoconferencia desde la cárcel de A Lama y Baña Gil se acogió a su derecho a no declarar, según ha podido confirmar este periódico. La causa será derivada en breves a la Audiencia para que acusaciones y defensas presenten sus relativos escritos de calificación provisional.

Grabaciones

Los hechos que previsiblemente llegarán a juicio quedaron inmortalizados en un vídeo de 57 segundos de duración que, junto a la pistola también en manos de la Policía Nacional, suponen las principales pruebas contra el exgrapo. Grabado por la propia víctima, en él se aprecia como Baña Gil dispara hasta en dos ocasiones al joven de 28 años, con quien ya había tenido una disputa previa a consecuencia de los perros., que llegó a protegerse detrás de un árbol al tiempo que lo amenazaba. “Vas a morrer [...] Xa te levaba tempo buscando” (sic), grita el hombre entre tiro y tiro.

Novia embarazada

Afortunadamente, ninguno de los disparos alcanzó a la víctima. “Llama a la Policía, llama a la Policía, llama a la Policía, llama a la Policía, que tiene un arma, que tiene un arma...”, advirtió nervioso y de forma repetitiva el perjudicado a su novia, una joven embarazada en avanzado estado de gestación que también se encontraba allí, resguardada en otro árbol, a unos metros de distancia. Tras el grave suceso, el investigado se fue del lugar, pero poco después acabó detenido. Tras su paso a disposición judicial, la magistrada del Juzgado de Instrucción 5 de Vigo decretó su ingreso en prisión provisional.

Antecedentes

Las imágenes forman parte de la investigación policial y judicial. El exgrapo se encontró con el joven y su novia minutos después de las seis y media de la tarde, cuando la pareja paseaba a su mascota y él llegaba allí con sus dos perros atados con largas cuerdas. La grabación arranca con Manuel Baña ya manejando la pistola. En esos primeros momentos parece que lo hace de forma torpe, incluso da la sensación de que se le atasca.

Amenazas y gritos

De fondo se escucha a los perros ladrar y en un momento dado, cuando la pareja se da cuenta de que lo que tiene entre sus manos es un arma, ella dice: “¡Oye, oye!”. A los 13 segundos de arrancar el vídeo se produce el primer disparo hacia el árbol donde está el joven. A la víctima se le cae el teléfono móvil, pero pronto lo recoge. El exgrapo profiere amenazas a gritos.

Sucursal bancaria

Antes del grave suceso del jueves, Manuel Baña y el joven ya habían tenido tres disputas previas porque supuestamente los perros del sexagenario atacaron otras tantas veces al can de este chico. Igualmente, tampoco es el primer incidencia de Baña Gil con este arma, una pistola de calibre 9mm. Y es que en octubre de 2022, el exgrapo llegó a sacar la misma pistola a modo de gesto intimidante en una entidad bancaria durante una disputa que mantenía con una trabajadora por problemas relacionados con su cuenta corriente.

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