El “tarifazo” de casi el 7% en la AP-9 lidera las subidas de los peajes en toda Europa este año

La AP-9 continúa siendo toda una referencia en Europa. Si en 2019 la columna vertebral de la Galicia atlántica era uno de los viales con mayor precio por kilometro de todo el continente, este 2024 tiene el honor de encabezar también los incrementos de sus peajes. El “tarifazo” del 6,65% producido el 1 de enero dista de forma notable ya no solo de las del resto de autopistas autonómicas o estatales; sino del resto del entorno continental al aplicarse de forma lineal a todos los tipos de vehículos.

Países como Alemania, Austria y Hungría han modificado sus normativas en la materia para adaptarlas a la última modificación de la Euroviñeta (Directiva 2022/362 de la UE). En ella se explica que los precios deberán imponerse en base a la clase de emisión de CO2 y el peso máximo técnicamente admisible. De esta manera, los vehículos que más contaminen y más “castiguen” a las calzadas absorben alzas que llegan hasta el 30%.

En el país magiar se han introducido tarifas para 9 clases diferentes de emisiones además de un recargo del 50% para los vehículos con más de 5 ejes que golpean principalmente a los camiones y no a los turismos o particulares. A su vez, los austríacos han incluido pagos por conceptos como la contaminación atmosférica y el ruido para subidas del 8,5% en su red.

Éstas son las únicas mayores que las del caso gallego, en el que se aplican por igual a cualquier usuario sin importar su impacto ambiental. Al sur del Miño, Portugal ha decretado un alza máxima del 2,1% en sus autopistas; cifra ligeramente superior al 1,6% de Italia. Solamente Francia, con un 3,5%, presenta subidas similares a los valores más bajos de nuestro país. Además, el gobierno galo gravará con un 4,6% los volúmenes de negocio superiores a los 120 millones como es el caso de Audasa en nuestra comunidad. Según las cuentas de Audasa, la concesionaria ha ganado 228,82 millones de euros en el último lustro en un volumen de negocio de 747,5 millones de euros.

Vecinos de Teis piden al Gobierno “plazos reales” para acabar con el ruido de la AP-9

A su vez, otros países de un tamaño más semejante al caso gallego como Suiza, Bulgaria o Croacia han congelado los precios. Mientras, en Bélgica se ha establecido una nueva categoría de cero céntimos por kilómetro para los vehículos de cero emisiones que circulen por Flandes.

Al mismo tiempo, la AP-9 se mantiene en lo alto de otro ránking. Los 19,40 euros necesarios para viajar entre Vigo y A Coruña dejan un coste de 12,76 céntimos por casa kilómetro; uno de los más altos de Europa. La cifra empeora si empleamos segmentos empleados por miles de vigueses a diario, como los 17,46 céntimos por kilómetro hasta Redondela o los 20 céntimos a Pontevedra.

Dos años sin noticias de la UE

Mientras miles de conductores y empresas gallegas siguen pagando estas tarifas, la Comisión Europea sigue sin pronunciarse sobre la prórroga de la concesión que consideró ilegal a finales de 2021. Y lo peor de todo es que el Gobierno sigue sin detallar los argumentos enviados a dicho órgano hace ya dos años en los que debía especificar si estaba de acuerdo o no.

La última ocasión en la que rechazó dar ningún tipo de explicación respecto la investigación fue en octubre, cuando en una respuesta por escrito en el Senado, el ejecutivo apuntó a que “dicho procedimiento de infracción aún no ha concluido, por lo que la información relativa al mismo está sujeta a confidencialidad”. Este argumento amparado en el artículo 4 del reglamento 1049/2001 del Parlamento Europeo ha sido empleado durante los dos últimos años por el Ministerio de Transportes para evitar dar a conocer su posición sobre la posible ilegalidad de la ampliación de la concesión.

En esa ocasión, la respuesta llegó a una pregunta de la senadora Carme da Silva (BNG) y añadió que “no se tiene conocimiento de cuándo la Comisión Europea emitirá su dictamen”. En su escrito, la que fue cabeza de lista del BNG al Congreso por Pontevedra en las últimas elecciones generales realizó cinco preguntas en las que también se apunta el estado de la tramitación, la postura del Ejecutivo, la posibilidad de un rescate o su transferencia a la Xunta. Sin embargo, todas estas cuestiones fueron ignoradas. Esta postura se mantuvo durante la campaña de las elecciones autonómicas, cuando el candidato socialista José Ramón Gómez Besteiro se comprometió a convertir en gratuita la AP-9 pero no llegó a desvelar si su partido estaba a favor o en contra de la investigación iniciada en Bruselas.

Suscríbete para seguir leyendo