La Policía Autonómica deja su actual sede para ubicarse en la Ciudad de la Justicia

Con el traslado judicial ya finalizado desde Semana Santa, a la Ciudad de la Justicia de Vigo le falta sin embargo todavía una última mudanza. La de la Policía Autonómica. Los 40 agentes que en la actualidad forman parte de este cuerpo policial en la ciudad olívica dejarán su actual sede en la calle Pateira, en las proximidades de la Escuela Oficial de Idiomas, y se instalarán en la torre judicial de Pizarro, concretamente en la planta baja, donde ya disponen de un espacio de más de 700 metros cuadrados. La fecha de este traslado aún no se ha concretado ya que esta futura ubicación está siendo objeto de algunas reformas de última hora para adecuarla a las “peculiaridades” de un servicio policial: los cambios que se están acometiendo tienen por objeto reforzar la seguridad, ganar privacidad para la atención a las víctimas de violencia de género o disponer de zona de vestuarios con duchas y taquillas para los efectivos.

“Estamos a la espera de que finalicen las reformas que hemos solicitado para trasladarnos”, confirmó ayer Jorge Manuel Rubal Pena, comisario jefe de la Unidad de Policía Adscrita (UPA) de Galicia. La nueva sede ocupa 715 m² y, junto a despachos y oficinas para los distintos grupos de trabajo, dispone de sala para víctimas de violencia de género, sala para menores, aula de planificación, calabozos u otras instalaciones complementarias, como los vestuarios o aseos. Las dependencias de la Policía Autonómica, que tendrán su propia zona de seguridad para el control de las personas que entran en estas instalaciones, se sitúan contiguas a otro espacio de casi 500 m² para uso en este caso de la Policía Nacional y la Guardia Civil, que es donde se encuentran las 14 celdas para los detenidos o presos que deben comparecer en los juzgados.

Un cambio "para mejor"

El cambio de sede, destaca Rubal Pena, es sin duda “para mejor”. En primer lugar, por ubicación, ya que estarán en el centro de la urbe. En la Ciudad de la Justicia además contarán con “despachos más amplios”, mayor “luminosidad” y una zona de aparcamiento que resolverá los problemas que, en este sentido, padecen en la calle Pateira. Y el hecho de estar en pleno edificio judicial permitirá “un trato más cercano y directo” con las unidades judiciales con las que trabajan con habitualidad, como es el caso de la Fiscalía de Menores o el Juzgado de Violencia sobre la Mujer: “Estaremos en el mismo complejo y eso evitará muchos traslados”.

Junto a los retoques que se están haciendo en la Policía Autonómica de forma previa a su mudanza, también está pendiente de finalización en la Ciudad de la Justicia la sala de autopsias del Imelga, que contará con el máximo nivel de bioseguridad y sustituirá a la del Hospital Nicolás Peña. Y mientras se acometen también obras en la gran plaza ubicada ante el edificio judicial para instalar una fuente ornamental, se está a la espera de la ampliación de varias de las salas de vistas y de los cambios ya proyectados en el acceso principal para protegerlo del frío y de la lluvia.

Suscríbete para seguir leyendo