Relevo en la cúpula de Povisa en plena negociación del concierto

Un nuevo relevo se consuma en la Dirección del Hospital Povisa. El Grupo Ribera Salud ha comunicado a los trabajadores que José David Zafrilla coge las riendas de la Gerencia, tras la renuncia del doctor Rafael Cabadas. Además, Daniel García Millán asumirá las de la Dirección financiera, con la salida de Luisa Sánchez de cargo.

José David Zafrilla es, desde 2020, director de operaciones del grupo valenciano y lleva más de 20 años de experiencia como gestor sanitario. Ya es conocido en Vigo por su breve paso por la Gerencia del centro de la calle Salamanca hace dos años y medio, cuando lo adquirió Ribera Salud. Relevó de forma interina a María Luisa Brandt Sanz en septiembre de 2020 hasta que, en junio del año siguiente, ocupó el puesto el doctor Cabadas, que ahora retoma la Jefatura del Servicio de Anestesia y Reanimación del hospital.

Según un comunicado remitido por el hospital, la consejera delegada de Ribera Salud, Elisa Tarazona, se ha desplazado hoy hasta Vigo para presentar a los nuevos directivos en el comité asesor de Povisa, un órgano compuesto por mandos intermedios. Destaca que "Zafrilla conoce bien el hospital y a todo el equipo". Además de anunciar estos nombramientos, Tarazona agradeció el trabajo realizado por Cabadas y Sánchez en la dirección. Ambos salen a petición propia.

Zafrilla, graduado en Enfermería por la Universidad de Valencia, tiene un Máster en Bioética por la Universidad Católica de Valencia. Completa su formación con el programa de Alta Dirección de Instituciones Sanitarias del IESE de la Universidad de Navarra y el programa de Excelencia en la Gestión Sanitaria de ESADE.

García Millán es interventor en el Grupo Ribera Salud desde mayo de 2020. Previamente, trabajó como analista en Ferrovial y en su filial en Estados Unidos, Webber.

El hospital vigués se encuentra en un momento clave. Está en negociaciones con su principal cliente, el Servizo Galego de Saúde (Sergas), para la renovación del concierto singular que los une y que está prorrogado desde el pasado mes de agosto. El modelo de pago per cápita al que cambiaron en la anterior firma, hace nueve años, no está resultando beneficioso para el centro concertado, que arrastra varios ejercicios de pérdidas.

Por otra parte, también está inmerso en las negociaciones con el comité de empresa para la renovación del convenio laboral, caducado desde 2010. Tan solo hubo una actualización de un 2,5% de las tablas salariales en 2022, tras diversas manifestaciones.

Ante la falta de avances, los sindicatos han convocado este viernes a los trabajadores a una asamblea para adoptar medidas de protesta. Plantean que desemboquen en una huelga.