Galicia ofrece a Dicastal suelo en la Plisan y tramitación exprés para su “megaplanta”

La filial de la china Citic negocia con la Xunta con la mediación de Stellantis | Quiere empezar “ya” la construcción de la planta y urge el terreno | Ourense, sobre la mesa

Una trabajadora en una de las plantas que Dicastal tiene en Marruecos.

Una trabajadora en una de las plantas que Dicastal tiene en Marruecos. / Dicastal

Adrián Amoedo

Adrián Amoedo

Dicastal, filial del gigante chino Citic Group, está en la recta final para decidir el emplazamiento de su próxima megafactoría de llantas, en cuya puja se encuentra Galicia. Responsables de la firma viajaron recientemente a la comunidad para valorar las posibilidades que ofrecen tanto la comunidad gallega como las otras dos regiones que pujan por hacerse con esta millonaria inversión, la zona norte de Portugal y el área de Valladolid. De la mano de Stellantis Vigo, que será uno de sus principales clientes, la multinacional urge soluciones inmediatas, tanto en lo que respecta a suelo como en la burocracia necesaria para comenzar a fabricar ya a principios de 2024. Y la apuesta de Galicia está clara: ofrece a Dicastal terrenos en la plataforma logística e industrial de Salvaterra-As Neves, la Plisan, y una tramitación exprés para que puedan comenzar la construcción de la planta lo antes posible.

El grupo Citic, que cuenta ya con un bagaje positivo en la comunidad tras la compra en 2011 de la calderera porriñesa Censa, necesita acercar la producción a sus clientes europeos, principalmente Stellantis, cuya planta más productiva se encuentra en la ciudad olívica. Para ello, y tal y como publicó FARO en exclusiva, el conglomerado necesita 100.000 metros cuadrados de suelo para una factoría de 60.000 que genere más de 500 puestos de trabajo.

Sobre la hoja de ruta, Dicastal preveía decidir el emplazamiento entre finales de este año y comienzos del próximo, con la idea de construir la instalación a lo largo de 2023 y empezar a producir llantas al año siguiente. Así hizo, por ejemplo, en Marruecos, país al que llegó en 2018 con una inversión de 350 millones de euros bajo el brazo, cuantía que se espera sea similar a la de esta nueva fábrica.

Sin embargo, los plazos que necesita son muy ajustados para un proyecto industrial de este tipo. Por este motivo, en las reuniones que mantiene la Xunta con los responsables de la empresa, sin intermediarios, Galicia ofrece otorgar a la iniciativa la consideración de proyecto industrial estratégico para acelerar todos los trámites necesarios, además de una opción primordial de terreno en el amplio espacio de la Plisan, cuya opción ya se preveía como la ideal por su emplazamiento y disponibilidad. Eso sí, en el puerto seco habría que unir dos de las parcelas existentes para reunir los requisitos que persigue Dicastal. La otra opción, que posibilitaría que la inversión se quedase en la comunidad, sería en la provincia de Ourense.

Competencia

No obstante, la competencia que ofrecen las otras dos opciones que baraja el grupo Citic está siendo muy dura. En Castilla y León la dilación burocrática para obtener las licencias necesarias es similar a la gallega, con lo que Portugal podría partir con una ventaja sobre ambas, a la que suma un suelo casi regalado y un menos coste de la mano de obra.

El norte luso es, desde hace años, opción de referencia para muchas empresas, especialmente en el sector de la automoción. Valladolid, por su parte, se está convirtiendo en un imán para nuevos proyectos claves para la nueva movilidad, como es la planta de baterías que planea la empresa eslovaca InoBat o la fábrica de autobuses cero emisiones de la firma Switch Mobility.

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El fabricante suizo Hess, especializado en trolebuses y autobuses eléctricos, elige el norte de Portugal para establecer una nueva fábrica.

Según trasladó la firma, la gran abundancia de pedidos ha provocado que necesite nuevas unidades fabriles y el distrito de Oporto es el lugar elegido. Un nuevo ejemplo de la capacidad del norte luso para atraer inversiones. Hess cuenta con varios pedidos de trolebuses en Francia, Austria y Suiza. Así, las cabinas de los últimos pedidos se construirán en Oporto, mientras que el montaje final continuará en la planta principal situada en Bellach, Suiza.

Con ello, reemplazará a la segunda instalación de producción actual de la firma, situada en Minsk, Bielorrusia, donde la producción tuvo que ser suspendida debido a la guerra rusa en Ucrania.

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