El nuevo Barrio do Cura subirá un peldaño más la próxima semana. El martes, la Xerencia Municipal de Urbanismo aprobará de modo definitivo el proyecto de compensación, que incluye el suelo urbano no consolidado y permite la planificación de parcelas que se van a ceder para uso público o equipamientos y la edificabilidad, así como los viales: destaca la prolongación de la calle Torrecedeira y la ampliación de Santa Marta y Llorente. El alcalde, Abel Caballero, concretó que al Concello le corresponde el 10% del suelo por ley y, a su vez, recoge terreno para equipamiento de unos 1.000 metros cuadrados para dar vida a la nueva escuela infantil y parcelas para espacios verdes y zonas libres. Estima que las obras comenzarán este año.
Caballero reveló que no se había presentado ninguna alegación en el periodo de exposición pública. Una vez validado en Urbanismo, el proyecto de compensación irá a la Junta de Gobierno. “Creemos que, antes de que acabe este semestre, tendremos aprobado en su totalidad el proyecto de urbanización. Es una acción excepcionalmente importante para la ciudad y va a velocidad de crucero”, apuntó el alcalde, que recordó que ya se aprobó esta semana de forma inicial el proyecto de urbanización: una vez logre el OK en la Junta de Gobierno, se someterá a información pública durante un mes y se pedirán los informes previos preceptivos.
Así será el nuevo barrio que revolucionará el Casco Vello
La intervención paisajística en el Barrio do Cura establece una franja de vegetación en el espacio de las aceras entre el paso de peatones y el de vehículos, lo que permitirá separar con más claridad la circulación rodada de los viandantes. “Las nuevas secciones de los viales y el eminente protagonismo de los dos grandes espacios públicos, la plaza y el parque, promueven la fácil y accesible movilidad por parte de los usuarios a través de todo el ámbito”, destacan fuentes municipales. Estos nuevos espacios darán cobijo a diferentes usos, zonas para la restauración, áreas de estancia o incluso huertos urbanos.
La nueva plaza “representará una nueva manera de ver el espacio público y la convivencia entre el humano y el sistema vegetal”, defienden desde la Praza do Rei. Para potenciar la sostenibilidad, habrá sistemas de aprovechamiento de las aguas pluviales, que serán empleadas en el riego de las zonas verdes tras recibir tratamiento. Además, se plantarán 215 árboles.
El objetivo que tienen entre ceja y ceja los responsables del proyecto es generar un jardín urbano, “resiliente y exitoso”, que mejore la calidad de vida de los habitantes del lugar y garantice un crecimiento rápido y sano del arbolado y un balance de oxígeno y dióxido de carbono positivo, así como una mejora ambiental óptima con una reducción máxima de los gastos de mantenimiento.
La filosofía que se aplica a la hora de concebir el uso público y la intervención paisajística se centra en una “visión novedosa que huye de las técnicas comúnmente empleadas en el diseño de las áreas vegetales urbanas”. “Esto se debe a que, en muchos casos, los resultados alcanzados con esta visión tradicional no responden a las funciones por las que se implantan ni a las expectativas de los ciudadanos”, detallan.
El convenio firmado entre los responsables del Barrio do Cura y el Concello establece la cesión de superficie para uso público por espacio de 4.424 metros cuadrados y la prolongación del mirador del Paseo de Alfonso, que verá duplicada su longitud. Presumirá de ascensores públicos para salvar las distancias con O Berbés y el propio Paseo de Alfonso y 300 plazas de aparcamiento público. Las casas catalogadas serán rehabilitadas.
Así serán los pisos del Barrio do Cura
El lavado de cara del Barrio do Cura, impulsado por el fondo Autonomy Global Opportunities y Gestilar, contempla la creación de más de 260 viviendas, todas exteriores. El porcentaje de pisos protegidos alcanzará el 30%, una cifra superior a la estipulada por la ley. Todas las actuaciones en el ámbito serán realizadas por los promotores.