El barco Alfageme, una de las insignias de la avenida de Castelao, se beneficiará de un lavado de cara. El “homenaje de la ciudad al mar”, en palabras del alcalde, Abel Caballero, se someterá a un lifting de la mano del Concello, que, además de reparar zonas de madera deterioradas y renovar las luces de navegación, colocará banderas con señales para recordar la fórmula con la que se comunicaban los buques antaño, sin nuevas tecnologías.
En 1941, el barco dejó los astilleros de Barreras para emprender una azarosa vida que le llevó por los mares del Gran Sol y el sur de Portugal. En 1998, fue dado de baja a la espera de destino. Durante años, su sino parecía el olvido y el desguace, como le ocurrió a tantos buques hermanos. En el año 2000, la corporación municipal decidió conservarlo: parecía que, por fin, se aclaraba su futuro, pero no fue así. Pese a una costosa restauración, el barco llegó a hundirse en los muelles de Bouzas. La urbe tuvo que esperar 14 años, y otra nueva rehabilitación, para que, finalmente, amarrase definitivamente en tierra.
Esta mole de acero de 27 metros de eslora, y uno de los escasos ejemplos que perviven de la construcción naval de la primera mitad del siglo XX, puso rumbo a la rotonda de Coia en febrero de 2015.
Transformación de la ciudad
El gobierno local continúa el proceso de transformación de Vigo. Caballero participó en la colocación de la primera piedra simbólica de las obras de humanización de la calle Rosal, en las que el Concello invierte 385.000 euros. Incluyen la renovación y adaptación de las aceras a la norma de accesibilidad, la renovación de 479 metros lineales de redes de servicios soterrados y la reordenación de las zonas de aparcamiento. Al ser una vía sin salida, se ha proyectado el acabado en hormigón impreso para dar sensación de plaza peatonal en la zona final de estacionamiento.
La humanización de esta vía situada en A Bouza también contempla el cambio de la red de iluminación pública con 10 nuevas farolas y cuatro nuevos puntos de luz como refuerzo para pasos de cebra. Habrá nueva señalización horizontal y vertical, así como papeleras, jardineras y red de riego.
