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Estas son las calles de Vigo por las que tendrás que circular a 30 km/h (y no a 50) desde mayo

Señal de 30 km/h en Vigo

El Gobierno dio luz verde en noviembre a la reforma de la Ley de Tráfico, que introduce importantes novedades en la circulación en zonas urbanas, donde se limita a 30 kilómetros por hora la velocidad máxima permitida en calles de un solo carril por sentido. Será el próximo 11 de mayo cuando entre en vigor esta novedad, que pretende potenciar la seguridad vial. De esta manera, el Concello de Vigo tiene hasta el próximo mes para cambiar la señalización y los ciudadanos disponen de cuatro semanas para adaptarse.

En la ciudad olívica, no se podrá exceder el nuevo límite marcado por Tráfico en tres de cada cuatro viales. En lo que se refiere al centro urbano, prácticamente todas las calles –las que todavía no tienen rebajada la velocidad a 30 kilómetros por hora– se verán afectadas al tener un carril único por sentido. Entre ellas, estarían Torrecedeira, Pi i Margall o López Mora. Otras, como Florida, Gran Vía, Castelao o Fragoso, quedarían exentas al tener más de un carril por sentido. En las humanizadas, como Ronda de don Bosco, el límite seguirá en 20 km/h; en la Alameda, semipeatonalizada, será de 10 km/h.

El límite genérico de velocidad en vías urbanas será de 20 km/h en vías que dispongan de plataforma única de calzada y acera

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La Dirección General de Tráfico (DGT) y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) han lanzado un manual para orientar a los ayuntamientos y entidades locales en la implantación de la limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora (km/h) en las vías urbanas y travesías, con motivo de la publicación de la última modificación del Reglamento General de la Circulación, que comenzará aplicarse a partir del 11 de mayo.

El documento pretende trasladar de una forma gráfica los posibles casos que se pueden dar en las poblaciones de España, con el objetivo de promover y ayudar a las Autoridades Municipales a aplicarlos de forma efectiva. El límite genérico de velocidad en vías urbanas será de 20 km/h en vías que dispongan de plataforma única de calzada y acera (Ronda de don Bosco), de 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación, y de 50 km/h en vías de dos o más carriles por sentido de circulación.

Señal de 10 km/h en la Alameda Ricardo Grobas

En concreto, el documento da respuesta a 32 situaciones y ejemplos reales que se pueden encontrar en las calles de las ciudades; se enviará a los ayuntamientos y se podrá descargar en las webs de DGT y de la FEMP. Además, se ha creado un video explicativo que muestra como los 30 km/h ayudarán a cambiar el tráfico y a construir ciudades más amables, en las que puedan convivir todos los usuarios de las vías.

En la presentación del manual, el director general de Tráfico, Pere Navarro, puso en valor el ejemplo de Bilbao, que el pasado septiembre se convertía en la primera ciudad del mundo de más de 300.000 habitantes en limitar a 30 la velocidad del tráfico rodado en todo su territorio. "Bilbao probablemente sea la ciudad que mejor ha entendido, explicado y aplicado lo de los 30 kilómetros por hora, con lo cual un reconocimiento por la valentía", ha destacado.

"En caso de atropello a 50 km/h, fallecen el 90% de las víctimas; a 30 km/h, el 10%"

Pere Navarro - Director general de Tráfico

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Navarro apuntó que esta modificación se debía a que lo habían solicitado algunos ayuntamientos y la FEMP. "Es un ejemplo, un poco de complicidad entre las administraciones que ayuda de alguna manera a abrir las puertas de conseguir los objetivos", subrayó, al tiempo que añadió que disponían de estudios que sostienen que en caso de atropello a 50 km/h, fallecen el 90% de las víctimas, mientras que, a 30 km/h, el porcentaje desciende hasta el 10%. "El dato era contundente", aseveró.

El director de Tráfico destacó también el ruido en las ciudades y dejó claro que es un "tema sensible". De esta forma, Pere Navarro concretó que hay estudios que señalan que su reducción mejora la calidad del sueño, los niveles de estrés y ansiedad, así como mejoraba la atención en estudios y trabajos.

"Cada vez tenemos más actores y se produce una interacción en las calles de nuestras ciudades. Esta interacción y con todos estos actores no es posible garantizar la seguridad a velocidades superiores a 30 kilómetros por hora. Punto", zanjó, para agregar que se trata de una medida dentro de un "todo un modelo" para hacer la ciudades más sostenibles y "humanas", que permita en el futuro ir eliminando "obstáculos" de las aceras, como señales o incluso algún semáforo.

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