"Después de 212 años vuelve a haber una batalla en Vigo" una lucha esta vez contra la pandemia por coronavirus. Así arengó una jornada con sabor agridulce el alcalde Abel Caballero. Hoy la ciudad debía ser una celebración con calles repletas, olor a choripán y estruendo de tambores, sin embargo el COVID ha truncado por segundo año consecutivo la Festa da Reconquista, que aún no ha podido estrenar su título de cita Interés Turístico Nacional.
En el acto institucional de esta mañana, Caballero insistía en que es hora de "reconquistar nuestra libertad frente al virus" una tarea que "debemos afrontar desde la unidad y en Vigo de unidad sabemos mucho". El regidor también se mostró convencido de que Vigo volverá a recobrar su pulso.
Frente al ambiente que se viviría si en COVID no fuese una realidad, muchos de los trajes han quedado colgados en los armarios y las pérdidas en la ciudad son significativas.
Con todo, algunos de los organizadores de la Reconquista así como algunos vecinos han decidido caracterizarse y salir a la calle para que, al menos, una jornada tan señalada no pase inadvertida. Por el momento no se han registrado aglomeraciones ni irregularidades relacionadas con la fiesta .
