Durante este puente de las fiestas de Navidad, los agentes de la Policía Nacional de Vigo han arrestado a 18 personas por distintos delitos, lo que ha dejado los calabozos con una alta ocupación. Son 17 hombres y una mujer.

Los delitos, informa la Policía Nacional, son muy diversos: nueve arrestados por malos tratos en el ámbito familiar, tres por reclamaciones judiciales y uno por quebrantamiento de condena en distintos operativos de control llevados a cabo por patrullas, uno por robo con fuerza, dos por robo con violencia, uno por tráfico de drogas y uno más por resistencia y desobediencia.

Destacan la detención de un varón que entró forzando ventanas y puertas para robar en un conocido local de hostelería de Teis. El hombre fue "pillado" por los agentes con una carretilla cargada de material saliendo del local. Le constan 32 detenciones anteriores, casi todas por los mismos hechos que esta última detención. Se da la coincidencia que sobre el mismo local la semana pasada hubo otros robos con fuerza.

Como consecuencia de los distintos controles establecidos para la seguridad de estas fiestas, así como el control de las actuaciones sobre el COVID 19, se han producido la identificación de tres ciudadanos buscados por distintas reclamaciones judiciales de los juzgados españoles, procediendo a su detención.

Tráfico de droga en un taxi

Un hombre fue detenido quebrantamiento de su condena. Sobre él pesaba una orden de alejamiento de su pareja a más de 300 metros, pero ella, un hjo y el detenido viajaban en el mismo vehículo procedentes de Ourense. A preguntas de los agentes intervinientes, manifestaron ambos que venían de compras a un conocido centro comercial de la ciudad para sus compras navideñas.

Los dos detenidos por robo con violencia, lo fueron por amenazar a otro ciudadano para robarle sus pertenencias. En cuanto el detenido por trafico de drogas, si bien las cantidades no era muy altas, si lo suficientemente para ser arrestado, asegura la Policía Nacional. Se da la circunstancia de que el detenido viajaba en un taxi a las 5:30 horas, no estando autorizado para circular a esas horas sin motivo justificado.

El último detenido se presentó en casa de su pareja a las 23:50 horas del día 26 en un estado alterado. La mujer no le abrió la puerta del edificio, por lo que golpeó los timbres de varias viviendas. Visto su estado violento, los vecinos llamaron al 091 Policía Nacional, que se presentó en el lugar, pero el varón se negó a deponer su actitud y rechazó identificarse a los agentes, a los que insultó con amenazas de muerte y lanzó golpes y patadas en las piernas, por lo que fue detenido por desobediencia.