Las nuevas restricciones por el Covid que entran en vigor esta medianoche, con el cierre de la hostelería como principal medida, ha llevado al Concello a endurecer sus propias limitaciones. Así, el Zoo de Vigo se clausura durante al menos un mes y las instalaciones deportivas municipales cerrarán a las 22.00 horas. A su vez, el aforo del Auditorio Municipal se limita al 30%, por debajo de la mitad que permite la Xunta. Esa ocupación del 50% sí se aplica en los cementerios, con un máximo de cuatro personas por grupo, siempre convivientes.

Así lo ha anunciado en la mañana de este viernes el alcalde, Abel Caballero, que alerta de un aumento de la demanda de ayudas de emergencia, derivado de los efectos de la pandemia. Caballero ha indicado que se vuelve a “notar la necesidad” de esas ayudas porque “en los tres últimos días se concedieron 115 por unos 18.000 euros, cuando el volumen habitual por semana es de entre 20 y 30”.

El regidor ha insistido en que “no hay límite presupuestario para las ayudas de emergencia", porque la máxima prioridad del gobierno local que encabeza es "no dejar a nadie tirado en la calle”. En este sentido, informó de que siete de los okupas desalojados del edificio de la Sareb de la céntrica Gran Vía, entre ellos una pareja, han sido realojados en hostales de la ciudad, donde permanecerán "por el tiempo que tarden en encontrar" un nuevo acomodo. Los otros, al menos dos más, “desaparecieron", según Caballero.

Por otra parte, se han puesto a disposición de los centros educativos otras 200 vallas para facilitar la separación de los alumnos en los patios de colegios y escuelas infantiles de la ciudad, y mañana sábado proseguirá el reparto de mascarillas en los mercados municipales de Teis, Bouzas, O Berbés y Travesas.

Caballero ha vuelto a reclamar 3.000 PCR diarias solo en Vigo y que la Xunta duplique el número de rastreadores, porque “todos” los que hay en la ciudad son del Ejército, al tiempo que critica las ayudas plantadas por la Xunta para la hostelería como compensación por el obligado cierre de un mes.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunció este jueves el establecimiento de ayudas para la hostelería por un importe mínimo de 1.000 euros por mes de cierre, “adicionales” a las ya existentes, y cuyo coste global será superior a los 12 millones de euros, cantidades que el alcalde considera “un bochorno” y “una vergüenza”. Aunque subraya que "respalda" y no discute las restricciones que entran en vigor a partir de esta medianoche, sí ha recalcado que la Xunta tiene que dar “ayudas muy superiores” porque “el coste” de las medidas para la hostelería es “inmenso”.

Caballero ha extrapolado esas cantidades a Vigo, y ha criticado que a los negocios de la hostelería de la ciudad le vayan a corresponder un millón, cuando a la exención de tasas por la instalación de terrazas el gobierno local le dedica 2,5 millones. Ha avanzado que el lunes anunciará “medidas de atención” al sector.