La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha condenado a 21 años de cárcel a un hombre que presuntamente robó a cinco personas con las que se citó a través de una página de contactos, hechos que tuvieron lugar entre los meses de marzo y mayo de 2019.

El tribunal considera acreditado que, una vez que se encontraba con los afectados, les echaba en sus bebidas una sustancia que les provocaba somnolencia y mareos, entre otros síntomas, lo que aprovechaba para robarles.

El autor de los hechos, de nacionalidad colombiana, compartía piso y, presuntamente, fechorías con su compañero de piso en la ciudad olívica, un vigués, presunto cómplice de este timo. Los jueces han considerado al primero culpable de cinco delitos de robo con violencia, cuatro de ellos en casa habitada, y uno de estafa. Al segundo, acusado de recibir y vender los objetos robados, la Audiencia de ha impuesto dos años de prisión por cometer un delito de receptación.

Mismo modus operandi

El condenado contactaba con sus víctimas, todas varones, a través de una red social de citas para un encuentro. Allí, aprovechando un descuido de los hombres, les suministraba benzodiacepinas, medicamento que junto al alcohol que habían consumido, dejaba a las víctimas en estado de "somnolencia", "mareo", "amnesia", "pérdida de consciencia" o "perdida de sus capacidades volitivas". Al día siguiente, estas se despertaban sin recordar buena parte de lo sucedido. Los magistrados aseguran en la sentencia que carecen de duda alguna de que el acusado cometió los hechos utilizando el mismo modus operandi."Las víctimas, debido al estado de aletargamiento o de disminución de sus capacidades superiores en el que se encontraban, ninguna oposición venían a mostrar, más que la propia de su propio estado de inconsciencia", señalan.

Los delitos tuvieron lugar a lo largo y ancho de la comunidad: Vigo, Pontevedra, Santiago de Compostela y Celanova (Ourense). Precisamente fue en la ciudad olívica donde tuvo lugar, según la Fiscalía, el primer episodio.

Posibles víctimas sin denuncias

Desde el conocimiento del caso, la Policía Nacional mostró su convencimiento de que tendría que haber muchos más perjudicados por este "timo del amor" en el que los ladrones buscan a sus víctimas en una activa web de contactos. Y ello porque en el domicilio de los detenidos se halló un buen botín. Junto a joyas, dinero en efectivo o teléfonos móviles, los agentes se incautaron de más de medio centenar de relojes. La creencia policial es que muchos afectados han optado por no denunciar por "vergüenza".'Pillado' por cámaras de seguridad

Varias víctimas, a lo largo del proceso judicial, llegaron a identificar al ciudadano colombiano que los habría estafado y sedado. En sus declaraciones iniciales,el colombiano, que está de forma irregular en España, reconoció los robos, pero negó la sumisión química. El vigués declaró que no estaba relacionado con estos hechos, señalando que él se limitaba a ir a buscar a su amigo y compañero de piso en coche cuando éste se lo pedía. En todo caso, según fuentes próximas a las pesquisas, al vigués se le ve en las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de un establecimiento de compraventa de objetos de segunda mano. También se analizan imágenes obtenidas de cámaras de bancos.

A mayores de las penas de prisión, la Fiscalía pide indemnizar a las víctimas en 5.013 euros por los objetos sustraídos.