Tras celebrarse la pasada semana el primer juicio en Vigo por las sanciones impuestas por la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra por saltarse el confinamiento en el estado de alarma, ayer la misma sala, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 1, acogió dos más. En una de estas vistas se dirimió el recurso presentado por un hombre de 85 años contra la multa que se le impuso tras ser sorprendido paseando en un parque de Bouzas el 17 de marzo, en los primeros días del encierro. El octogenario alegó ante el juez que padece una enfermedad crónica (una patología cardiovascular) y que tuvo que salir a la calle ya que su médico le recomienda pasear.

El otro caso fue el de otro vecino, denunciado por estar en la vía pública, concretamente en un parque de la zona de la calle Toxal, el 22 de marzo. Estos juicios se unen al celebrado la pasada semana, por el recurso que presentó una joven multada cuando también caminaba por un parque. En relación con este último asunto, el juez se ha topado con que no se presentó la documentación que demuestra que la chica ya abonó esa multa que ahora recurre. Ha dado un plazo a las partes para que acrediten el pago: de lo contrario, la demanda sería inadmisible al no haberse agotado la vía administrativa previa.