El verde gana espacio en Samil El Concello ha renunciado a recuperar las instalaciones de la antigua cafetería Camaleón, cuya concesión fue cancelada el año pasado, y en vez de eso ordenará su derribo para destinar la parcela, en pleno paseo, a zona verde. Lo anunció ayer el alcalde, Abel Caballero, que reconoció que esa concesión nunca se debió de haber dado -"Fue muy desafortunada", lamentó- y que ya es hora de subsanar el error. El Concello tampoco descarta retranquear el paseo en esa punta de la playa ayudar a la recuperación de las dunas, siguiendo el modelo de éxito implantado en O Vao, aunque no hay una decisión tomada.

Hace un año que la Junta de Gobierno decidió no prorrogar la concesión de la emblemática cafetería de Samil, que unos meses cerraba sus puertas de forma definitiva. El Concello recepcionó ese espacio el pasado 14 de enero, y aunque a priori contemplaba la idea de reubicar la cafetería y volver a sacar a concurso la concesión, como se hizo con el Jonathan (hoy Marina Cíes Beach Club), ha decidido finalmente demolerlo y ajardinar toda la zona para disfrute ciudadano. "Ya he dado órdenes para iniciar un expediente administrativo para contratar el proyecto de demolición y ajardinamiento de la zona", señaló Caballero, que apuntó que repetirán la experiencia del antiguo restaurante de As Dornas, también en pleno paseo de Samil.

Lo que no concretó fue si ese ajardinamiento irá asociado a un retranqueo del paseo para ayudar a la regeneración natural del arenal vigués. Hace un año, el Concello ya barajaba esta opción en un tramo de unos 200 metros lineales, desde el Camaleón hasta fin final del paseo, una zona que ya en 2013 fue modificada para potenciar el sistema dunar. Con estas adecuaciones, el paseo y espacios quedarían completamente integrados en el entorno, reduciendo también el impacto ambiental; una solución que busca garantizar la supervivencia de la principal playa de la ciudad y que permitiría a cientos de miles de usuarios seguir disfrutándola cada año de una forma sostenible.

El proyecto tenía como espejo las notables intervenciones realizadas en 2005 en O Vao, donde el movimiento de arena permitió el crecimiento hasta los siete metros de su frente central, recuperar más de una veintena de especies de flora autóctona y ganar 60 centímetros de zona de uso para bañistas. Pero fuentes municipales matizaron ayer que no hay una decisión tomada al respecto. "Se irá viendo", apuntaron.