Volvo Cars ha confiado en la experiencia del ingeniero vigués Javier Varela, ex del Grupo PSA y forjado en Balaídos, para la reorganización de la multinacional sueca de automoción. Varela, que ocupaba el cargo de vicepresidente de Producción y Logística, sube un peldaño en la compañía al asumir Operaciones Industriales y el Área de Calidad, por lo que se convierte en el principal ejecutivo de la parte industrial de Volvo, adonde llegó procedente del Grupo PSA y tras una meteórica carrera que le llevó a pilotar varias plantas como El Palomar en Argentina, Sochaux en Francia o Kolin en la República Checa, dentro de la extinta alianza con el gigante nipón Toyota.

El nombramiento de Varela tomará efecto el próximo 14 de abril, según informó la empresa. Con esta nueva estructura, diseñada para mejorar la agilidad en la toma de decisiones, Volvo creará cuatro áreas de negocio que estarán bajo la supervisión del consejero delegado de la firma, Hakan Samuelsson.

Varela Sobrado se había convertido en septiembre de 2012 en el primer "no francés" al frente de una planta de PSA en territorio galo, y no de cualquier fábrica, sino del complejo de Sochaux, la factoría más grande de Francia y cuna de la familia Peugeot. Posteriormente, la corporación gala lo envió a la República Checa como vicepresidente de la joint-venture con Toyota que explotaba la fábrica de Kolin, hasta que en 2016 daba el salto a Volvo Cars.

Durante su etapa en PSA, en el sector siempre se dio por hecho que Javier Varela volvería algún día a Vigo como director de la planta de Balaídos, pero otro vigués, Muñoz Codina, se cruzaría en su camino, lo que precipitó su salida hacia Volvo.