El BNG de Vigo mostró ayer su disconformidad con las modificaciones horarias aplicadas desde hace varias semanas en los autobuses urbanos de la ciudad. El concejal Xabier Pérez Igrexas calificó los cambios de "gran chapuza" y denunció que empeoran el servicio. El edil nacionalista denunció que las alteraciones diseñadas por Vitrasa "fueron aplicadas con la autorización del gobierno local" y significaron una "merma significativa del servicio". Concretamente, Pérez Igrexas señaló que se impone un modelo de "horarios irregulares" que impiden que las personas usuarias sepan con anterioridad a qué hora pasan los autobuses por las diferentes paradas. También denuncia una reducción de las frecuencias.