Hizo falta peripecia y media para que los siete vigueses -incluida una niña de siete años- atrapados desde el domingo en Nueva York, pudiesen volar de vuelta a España. La sucesiva cancelación de vuelos de la aerolínea low cost Norwegian retuvo a este grupo durante más de 72 horas entre el aeropuerto JFK y un hotel en el distrito de Queens, a una hora del centro de la ciudad de los rascacielos. Finalmente los afectados volaron de madrugada; tuvieron que comprar billetes de otra compañía y desplazarse hasta la terminal de Newark, en New Jersey.

Eso sí, previo pago de 700 euros por persona y otros 150 de desplazamientos entre aeropuertos, que deberán reclamar a Norwegian. "Contentos, con ganas de llegar a nuestras casas", resumió uno de ellos y padre de la niña, Ramón Iglesias. Su vuelo llegó al aeropuerto de Sá Carneiro (Oporto) al mediodía; uno de los integrantes del grupo todavía tiene un desplazamiento pendiente a Madrid, ya que su coche quedó en Barajas.