Las cuestas de Vigo parecen menos cuestas si se hacen a lomos de una 'mountain bike'. Así lo experimentó el medio centenar de valientes que desafiaron las empinadas y enrevesadas calles de la zona vieja en busca del mejor tiempo con el que zanjar su hazaña en la prueba del Descenso. Para ello solo necesitaron 67 segundo, al menos el canario Edgar Carballo, quien se impuso en la categoría masculina rebajando en dos segundos el tiempo del año pasado y en más de diez los últimos registros. Carballo es un viejo conocido de esta modalidad la cual venció en 2017. En categoría femenina, donde este año participaron 8 mujeres, Eva Castro revalidó su triunfo parando el crono en 82 segundos, cinco menos que con los que venció la pasada edición.
El Descenso por el Casco Vello ( MTB Downtown) se ha convertido en su 11º edición en la disciplina más esperada por el público. Esta modalidad de bajada en Mountain Bike cumplió una década en esta XVIII edición de festival, y durante el recorrido, que se inicia desde la plaza del Concello hasta el puerto, a pocos metros del recinto del evento, los deportistas sortearon diferentes obstáculos por las calles de la ciudad olívica, combinados con saltos de hasta 11 metros. Como novedad este año, una vez concluían el recorrido debían saltar por encima de un coche estacionado en la Estación Marítima, el ya denominado como salto Nissan.
Pie de foto que corresponda Velocidad y riesgo en la bajada por el Casco Vello // JOSÉ LORES
Las pruebas comenzaron a las 16.00 horas. Primero con las clasificatorias femeninas para continuar con la masculina. Fue sobre las 18.00 horas de la tarde cuando arrancaron las finales. Tras el tiempazo marcado por Eva Castro le siguieron los de Estefanía Cabarcos y Rosi Martínez. La viguesa Uxía Álvarez finalizó en una gran quinta posición.
En cuanto a la categoría masculina, la diferencia la marcaron tan solo tres décimas, tiempo que separó al vigués Joel Antón de un triunfo en su tierra. Tercero quedó Marcos Veiga, campeón en el 2018.
