Científicos del Oceanográfico de Vigo descartan que el manto rosado que sorprendía el pasado miércoles a los bañistas y vecinos de Bouzas tenga un origen biológico, por lo que se debería a un vertido cuyo origen todavía es desconocido.
El investigador Francisco Rodríguez, especialista en microalgas marinas, analizó ayer varias muestras en su laboratorio de cabo Estai y descartó que el aspecto del arenal de O Adro se deba a organismos vivos. El hallazgo de células vivas de zooplancton y fitoplancton en dichas muestras también descartaría una elevada toxicidad.
A pesar del llamativo aspecto de la playa, Medio Ambiente confirmó que no se había puesto en marcha el protocolo de emergencias.
Dos células de fitoplancton en medio del vertido rosa. // Francisco Rodríguez