El presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, acompañó ayer a Elena Muñoz durante una jornada maratoniana que le llevó por las siete ciudades gallegas. Vigo fue su quinta parada antes de cerrar la campaña en A Coruña y Ferrol. "Me voy a seguir comprometiendo con Vigo como desde el primer día que tuvimos el honor de servir de forma ininterrumpida durante tres mandatos a Galicia", dijo antes de pedir el voto para la candidata popular. Durante su intervención, destacó la importancia del "servicio público" frente a otros modelos políticos. "Hay que ejercer la política desde la humildad y no desde la prepotencia, es mejor la crítica y la autoexigencia que el conformismo", insistió.

En su discurso, arremetió contra el mensaje de Caballero -"Sí, somos Vigo"- remarcando que "Caballero no es Vigo y yo no soy Galicia, soy un servidor de todos los gallegos". Lo mismo apuntó de Elena Muñoz, a quien destacó como "una servidora de los vigueses mientras que Caballero es un servidor de sí mismo" y recordó que ella, como conselleira de Hacienda durante la recesión, "fue capaz de mantener la actividad económica mientras que otros no han sido capaces de mantener el paseo marítimo". El presidente gallego llegó incluso a comparar al regidor vigués con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. "Caballero no es Vigo y Maduro no es Venezuela, aunque se crean que lo son". "Vigo no es propiedad de nadie, no es el cortijo de ningún señorito", arremetió antes de aseverar que "sin el PP en Vigo no habría depuradora, ni ampliación de Rande ni autovía del Morrazo".