La Xunta da por buenas las previsiones del Concello y el fondo propietario de los terrenos de Barrio do Cura y autoriza la evaluación ambiental estratégica simplificada de la modificación puntual del PXOM remitida por Urbanismo de Vigo con la intención de desbloquear este ámbito central para el desarrollo del casco histórico y la mejora de las conexiones viarias y peatonales entre el Paseo de Alfonso y Torrecedeira. La resolución favorable fue remitida en las últimas horas al gobierno vigués y en los próximos días se publicará en el Diario Oficial de Galicia (DOG) y en la web de la Consellería de Medio Ambiente. Los técnicos autonómicos concluyen que el proyecto tendrá "un impacto positivo sobre la movilidad" en el casco urbano al crear plazas de aparcamiento para dar servicio a residentes del Casco Vello y no prevén efectos significativos a nivel ambiental o paisajístico.

Consideran razonado el interés público de la actuación promovida por Autonomy Global Opportunities para tramitarla de forma simplificada en el hecho de que "queda acreditada la intención de dar a un ámbito actualmente muy degradado una ordenación que posibilite su recuperación urbanística y la obtención de dotaciones públicas". El informe de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Cambio Climático concluye que lo que se pretende es restablecer la ordenación urbanística del PERI de 2014 que había logrado amplios consensos y que quedó invalidado tras la anulación del PXOM de 2008. La propuesta diseña una plataforma que dotará de continuidad al Paseo de Alfonso XII y crea una plaza mirador hacia la ría. Se proyecta también un bloque para completar la medianera existente en Torrecedeira y se establece que los edificios de viviendas tendrán entre cinco y nueve alturas máximo.

El ámbito tiene 23.706 metros cuadrados y destina a uso público casi un tercio del suelo al incorporar 4.926 para espacios libres y zonas verdes, 1.760 para equipamientos públicos y 300 plazas de aparcamiento. El cómputo global de superficie cedida para uso público roza los 8.000 m2 y la inversión se estima en 130 millones de euros de los cuales 19 se reservarían para la urbanización de nuevos viales, la dotación de servicios básicos y la creación de espacios para la ciudadanía.

El dictamen de Medio Ambiente incluye un informe del Instituto de Estudos do Territorio que concluye que en líneas generales se favorece la continuidad visual y solo pide que se tenga en cuenta la guía de colores y materiales de la Xunta para obrar en el área paisajística de las Rías Baixas. A nivel de movilidad, se valora la mejora sustancial que supondrá el nuevo vial de conexión entre el Paseo de Alfonso y Torrecedeira, los recorridos peatonales y se establece la posibilidad de habilitar un acceso a través de escaleras mecánicas o ascensores desde O Berbés para facilitar el ascenso en una parcela con más de 30 metros de desnivel.

Las cautelas más importantes se establecen desde la Dirección Xeral de Patrimonio, que identifica el ámbito de Barrio do Cura como zona de "alta potencialidad arqueológica" y exige trabajos para el reconocimiento del terreno en toda la parcela y, en especial, en la obra del parking subterráneo. Los promotores deberán cumplir los criterios específicos de intervención en el entorno de bienes catalogados y conservar tanto las antiguas viviendas de los curas como los elementos identificados por el estudio histórico-arqueológico realizado en noviembre de 2013 y que incluye como elementos singulares el asilo y la iglesia de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, el cruceiro do Campito, el lavadero de Poboadores y la fuente da Barroca.

El documento responde además a las 26 alegaciones presentadas al plan de Barrio do Cura, la mayoría presentadas por el colectivo "Horta do Berbés" y que incide en preservar la flora y fauna de la actual zona verde de más de 10.000 m2 y que ya consiguieron que la justicia paralizase la orden de derribo que pesaba sobre un pequeño grupo de casas populares en muy mal estado.

Por ahora el fondo propietario avanzará en la demolición de las 33 construcciones del ámbito en peor estado mientras se tramita esta modificación puntual del PXOM que acaba de dar su primer paso. Ahora la promotora tiene que presentar el documento definitivo para su aprobación inicial, el Concello solicitar los informes preceptivos y luego se llevaría a pleno para aprobarla inicialmente. Tras la apertura de alegaciones a los afectados, se procedería de nuevo a su aprobación provisional y luego a la definitiva. Este recorrido aún llevará varios meses. La intención de Autonomy es iniciar la obra física en 2019 para finalizar el desarrollo en el año 2022 tras más de una década de retrasos.