"Quisiera escribir la canción más bonita del mundo, pero no sé por dónde empezar, porque voy a hablar de tu tartamudez y es a mí a la que no le fluyen las palabras como quisiera.

Me sale la palabra "disculpa". Disculpa por no haberte ayudado antes, por haber cerrado los ojos y no haber entendido tus angustias y tus miedos. Ahora sí los entiendo.

Ahora entiendo tu enfado cuando no te salían las palabras y te decía "respira". Ahora entiendo tu irritación cuando te quedabas bloqueada y terminaba tus frases. Ahora entiendo tu disgusto cuando repetías las sílabas y te decía "habla más despacio".

También entiendo tus miedos cuando empezabas un curso y temías la reacción de tus nuevos compañeros ante tu tartamudez. Entiendo tus náuseas por la mañana antes de ir a clase y tu angustia al pensar que te harían leer.

Me decías que cuando cantabas no tartamudeabas. Lo decías contenta, ahora también lo entiendo.

Hoy soy capaz de decir "orgullo", porque no puedo dejar de sentirme orgullosa de ti. Has conseguido, a pesar de la incomprensión que veías a tu alrededor, a pesar de las caras de asombro o de circunstancias, incluso de risa, mirar al miedo cara a cara.

Cuando estabas muy abajo, has levantado la cabeza y has salido adelante, diciendo tu nombre muy alto, MARTA, sin avergonzarte porque no te salga a la primera.

Orgullosa de ti, porque has roto la muralla de silencio que se levantaba a tu alrededor a fuerza de tesón y valentía. Esos silencios que te hicieron llorar te han enseñado a ti y a los que te rodean que SÍ, que sí tienes ganas de comerte el mundo y que lo vas a conseguir. Que tu tartamudez no te va a impedir conseguir tus metas.

Orgullosa de ti porque has sabido enfrentarte a los malos momentos como una campeona, sin pararte ante los obstáculos.

¿Qué más te puedo decir? Que tú y yo sabemos que te mereces lo mejor, que estaré a tu lado con mi mano tendida para que si la necesitas te apoyes en ella, pero estoy segura de que no va a ser así, que no la vas a necesitar, porque eres valiente y volarás muy alto. Yo te observaré orgullosa y estaré tan feliz como tú.

Pero cariño, nunca te calles, nunca".

*Araceli Barrientos, madre de Marta.