El urbanismo vigués avanza hacia su desbloqueo total. La Gerencia de Urbanismo aprobará mañana los contratos de redacción del nuevo PXOM y la revisión de la cartografía de la ciudad. El alcalde, Abel Caballero, precisó que la elaboración del Plan Xeral se adjudicará por algo más de dos millones de euros a las empresas Oficina de Plan S.A. y Sepia Técnicos S.L. Los trabajos para actualizar la cartografía los acometerá la firma Geograma S.L, que logró adjudicarse el contrato por 348.000 euros.

El regidor también precisó que las empresas encargadas de redactar el nuevo PXOM dispondrán de dos meses para formular un diagnóstico socioeconómico. A partir de ese momento el pliego establece que deberán finalizar la redacción del Plan Xeral en un plazo máximo de cuatro años. Más ajustado es el margen que se contempla para concluir la cartografía, labor que deberá acabarse en un año.

La adjudicación de los contratos se cerrará casi tres años después de que el Tribunal Supremo anulase el PXOM de 2008. Desde entonces el Concello ha buscado diferentes alternativas para despejar el urbanismo vigués, como por ejemplo la "solución Parejo", una alternativa propuesta por el catedrático Luciano Parejo y que contemplaba recuperar las partes del Plan Xeral que no fueran cuestionadas por el tribunal y subsanar las otras.

Caballero lamentó ayer la "la Xunta no aceptó y no quiso colaborar" con aquella vía, que habría permitido -incidió el alcalde olívico- que el PXOM pudiera "estar en vigor" desde hace tiempo.

El contrato para la redacción del PXOM se adjudicará tras el fracaso de un primer intento de licitación, a principios de 2018, que quedó desierto. Entonces el gobierno local atribuyó el fracaso de la convocatoria a la cuantía del concurso -1,6 millones de euros-, que las compañías consideraban insuficiente. Las empresas señalaban también la complejidad de dar forma al plan general, documento que suele motivar miles de alegaciones.

Para desbloquear el urbanismo de la ciudad sin tener que esperar a tener listo el nuevo PXOM, el Gobierno local ha promovido en los últimos meses la ordenación provisional, un instrumento que permitirá rescatar actuaciones en un 25% del suelo del municipio. A finales de julio la corporación daba luz verde -con los votos favorables de PSOE y PP- a la aprobación inicial del plan de ordenación. Según detalló entonces el Concello, sumado a los planes del Casco Vello y Bouzas se desenrocaba cerca del 38% del urbanismo de Vigo.