Uno de los casos más llamativos relacionados con derechos de autor que registró el juzgado vigués el pasado año fue la demanda de la SGAE contra la Coral Casablanca. La sociedad les reclama más de 7.300 euros al considerar que la agrupación habría utilizado en numerosos conciertos el repertorio de obras musicales "sin haber obtenido" la preceptiva autorización y sin haber abonado "los derechos de autor que gestiona la demandante". La coral se opone a la demanda, entre otras razones al definirse como una entidad sin ánimo de lucro. "No obtenemos beneficios con nuestras actuaciones", argumentaron desde el principio.

Sin posibilidad de acuerdo entre las partes -es "inviable", confirmaban ayer fuentes de la agrupación viguesa-, el siguiente paso judicial será en septiembre. El día 12 está señalada la audiencia previa. En la misma previsiblemente el juez emplazará a la sociedad y a la coral a llegar a un acuerdo que ya se descarta. Ante este escenario, cada parte propondrá la prueba que estime necesaria y, una vez el magistrado acepte la que vea pertinente, se fijará fecha para el juicio, previo a la sentencia que dictaminará quien tiene razón.