José Manuel Costas, condenado por los juzgados de Vigo como cabecilla de la mayor trama de fraude fiscal destapada en Galicia con epicentro en el grupo familiar "Las 5 Jotas", que facturó 150 millones de euros de facturas falsas con una defraudación a Hacienda de 50 millones de euros, comparecerá hoy ante el tribunal de Relações de Guimarães en Portugal.

El empresario vigués, incluido entre los cincuenta fugitivos más buscados de Europol tras huir hace dos años para eludir los 6 años de cárcel que debe cumplir, residía desde hace unas semanas en una casa aislada de localidad lusa de Esposende, y hoy tendrá que decidir si acepta su extradición a España o bien se opone, lo que dilataría un proceso por el que los jueces lusos podrían acordar su ingreso en prisión en Portugal, donde los delitos contra la Hacienda Pública -por los que ha sido condenado- cuentan con fuertes sanciones.

A su regreso a España le espera su inmediato ingreso en prisión para a cumplir la condena, que es firme, y otra decena de juicios -ha comparecido ya en más de 80- en solitario, que se celebraron con él en rebeldía contra su hermano Jacobo, con quien comparte condenas y responsabilidad penal, así como de empresarios que se beneficiaron de las facturas falsas.

Su captura se produce con tiempo para que el próximo mes de octubre comparta el banquillo de los acusados con 12 directores, interventores y apoderados de entidades bancarias con las que trabajaba y que le habrían facilitado, según la Fiscalía, un lujo superior a los 6 millones cada uno de ellos, procesados penalmente a nivel personal, y se enfrenta a penas de dos años y medio de prisión, lo que conllevaría su ingreso en la cárcel y multas de 3.600 euros por presuntos delitos de falsedad documental continuada con la apertura de cuentas a nombre de personas que lo desconocían, así como irregularidades en movimientos de efectivo de cheques y efectos bancarios.