El alcalde de Vigo sitúa toda la responsabilidad de la paralización del bombeo de refuerzo a Eiras en el presidente de la Xunta. Abel Caballero resta importancia al rechazo al proyecto del regidor de Ponte Caldelas o de cualquier otro municipio al considerar una mera justificación que la Consellería de Medio Ambiente condicione ahora el proyecto a la búsqueda de consenso político. "Si para tomar decisiones hay que lograr el acuerdo de todos las administraciones públicas no gobernarían", destacó el socialista antes de acusar al Ejecutivo gallego de "no actuar para generar una crisis del agua en Vigo con la intención de que perjudique personalmente a Abel Caballero".

El Concello de Vigo se muestra dispuesto a mejorar su oferta y pasar de financiar el 80% de los 5,4 millones de presupuesto a asumir "la totalidad" de la obra con tal de que se ejecute. "Si es preciso lo pagamos íntegro. Ya en su día me ofrecí para que nadie utilizara el coste como argumento para no realizar el proyecto", recordó ayer el alcalde de Vigo, que considera que Feijóo "se esconde tras las críticas de un alcalde para no cumplir con sus obligaciones". Caballero asegura que tras seis meses sin avances desde la firma del convenio en Vigo "no se trae agua a Vigo porque Feijóo no quiere y ahora nadie nos garantiza el abastecimiento a casi medio millón de habitantes", le reprochó.