Casi 60 mujeres han hecho uso desde el 16 de febrero de las paradas nocturnas a demanda en Vitrasa. La medida permite que los solicitantes puedan bajarse del autobús urbano en cualquier punto del recorrido y sin necesidad de esperar a las paradas reglamentarias. Inicialmente pensada para las mujeres que viajan solas por las noches, dicha opción también está abierta para hombres, niños y personas con movilidad reducida. Entre las 59 usuarias que hasta la fecha han demandado el servicio, que no tiene coste alguno para el gobierno local ni para la concesionaria, destacan las chicas de entre 20 y 30 años, que representan más de la mitad del total. El resto de franjas de edades están equilibradas y tan solo una joven menor de 20 años pidió una de estas paradas.
Cualquier pasajero puede solicitar al conductor que se detenga en un punto concreto de la ciudad. En este primer trimestre, las paradas a demanda más solicitadas fueron en Travesía de Vigo, Castelao, Tomás Alonso y Urzáiz, aunque en las estadísticas ofrecidas por el Concello aparecen cerca de una veintena de calles del casco urbano y las afueras de la ciudad viguesa.
Los viajeros tienen la opción de requerir esta opción entre las 22.30 horas y las seis de la madrugada. A diferencia de lo que pueda parecer a primera vista, la mayor concentración de solicitudes llega en las primeras horas. A partir de las tres de la mañana, las peticiones descienden considerablemente. El mayor pico se da recién pasada la medianoche, cuando muchas mujeres regresan a casa después del trabajo o de tomar algo en el centro de la ciudad.
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En un primer momento la medida se estableció para los fines de semana, aunque una vez que se puso en marcha se amplío a cualquier día del mes. Pese a ello, más del 90% de las solicitudes llegan entre viernes, sábado y domingo, las tres jornadas en las que más movimiento suele haber.
Vigo se sumó a Terrasa y Bilbao en instaurar las denominadas paradas de autobús antiacoso, de notable éxito en Francia. Fue, además, la primera ciudad gallega en ofrecer este servicio. Semanas después de que el alcalde Abel Caballero anunciase esta medida en la urbe olívica, el Área Metropolitana de Barcelona aprobó que el transporte urbano de la Ciudad Condal hiciese lo propio. El regidor vigués señaló que era una forma de "hacer Vigo todavía más segura para las mujeres".
La mecánica es la misma en todas las ciudades. Las usuarias que quieran beneficiarse de este servicio deben comunicarle al conductor la dirección exacta y permanecer en los asientos delanteros del autobús. Una vez en el destino, las mujeres deberán bajar por la puerta más cercana al chófer. En Vigo, la medida está activa en las tres líneas nocturnas: N1 (Samil-Buenos Aires-Avenida Europa), N2 (Teixugueiras-Buenos Aires) y N3 (Praza América-Urzáiz-Avenida Ponte ) y en las diurnas que prestan servicio más allá de las 22.30 horas.
