El antiguo Hotel Galicia que durante casi seis décadas mantuvo sus puertas abiertas en el número 11 de la calle Colón se transformará en el plazo de año y medio en el edificio de viviendas más eficiente de Galicia y uno de los que menos energía consumen de España. Los promotores de esta actuación a la que la Gerencia de Urbanismo dio licencia esta semana han apostado para este céntrico enclave por un proyecto singular con un único piso por planta de entre 156 y 225 m2. La principal novedad de la actuación es que la sociedad que lo impulsa quiere convertir este inmueble en el primer bloque residencial de la comunidad gallega en lograr el certificado internacional Passivhaus que distingue a construcciones energéticamente eficientes e introduce criterios sobre calidad del aire y salud en el sector inmobiliario.

La sociedad Rúa Colón 11 demolerá el edificio y solo conservará las zapatas, los pilares y las placas del establecimiento comercial que cerró sus puertas en 2012. La envolvente y los cerramientos serán completamente nuevos al igual que todos los interiores. La constructora San José será la encargada de levantar el nuevo edificio con una superficie construida de 2.067 m2 y un presupuesto de ejecución material que la licencia municipal fija en 1,1 millones de euros. Los trabajos en la finca arrancarán de forma inmediata y los promotores estiman un plazo de obra de 18 meses.

"Es un proyecto completamente distinto a todo lo que hay en Vigo y en Galicia. Buscamos durante más de un año hasta dar con un modelo de construcción eco que apuesta por la calidad, el confort y la salud", explican sus responsables, que aspiran a convertirlo en el primer bloque de viviendas de Galicia en lograr el sello Passivhaus. Hay alguna construcción particular que lo tiene y varios edificios residenciales que lo intentaron, sin éxito. En España son menos de media docena los que superaron la auditoría alemana.

Los sistemas de control son tan estrictos que incluso los obreros deben acudir a cursos de formación para poder participar en el proyecto. Hay además muy pocos arquitectos con la certificación que otorga The Passive House Institute y Leonardo Llamas, responsable actual del proyecto vigués, es uno de ellos.

Los cinco principios básicos de este estándar de construcción son el aislamiento término para reducir la demanda de energía y la aparición de patologías en la estructura, la ausencia de puentes térmicos, la hermeticidad completa del edificio para que no entre ni salga aire del exterior y se consiga una mejor acústica, ventanas y puertas de altas prestaciones, y la ventilación mecánica con recuperación de calor. Estos aparatos que se traen de Alemania consiguen aprovechar el aire caliente del interior para calentar el del exterior o viceversa durante las 24 horas y a una velocidad imperceptible para los ocupantes. Consiguen un aire totalmente filtrado en el interior sin polvo ni ácaros.

El proyecto de Rúa Colón 11 incluye ocho viviendas, una oficina y un aparcamiento mecánico con una plaza por piso. Se ha anexionado un bajo colindante para incorporar trasteros. Las fachadas se modificarán completamente para abrir nuevos huecos de iluminación y ventilación, claves en este concepto residencial poco frecuente en España pero que en Alemania se implantó en 1991. La promoción superó el examen de la Dirección Xeral de Patrimonio por ubicarse en el entorno del yacimiento Pontevedra-Areal y debería concluirse para inicios de 2019.